¡Sorpresa! y Rompiendo a Leer, citas con el teatro aficionado en Almería

¡Sorpresa! y Rompiendo a Leer, citas con el teatro aficionado en Almería

Compartir
Grupo Pipirijaina.
Grupo Pipirijaina.

Es la última cita que se incluye dentro del Programa Estable de Teatro Aficionado, que ya apura sus últimas citas. Además, será por partida doble este miércoles, 16 de marzo en el Teatro Apolo de la capital.

El Grupo Pipirijaina interpretará la obra ‘¡Sorpresa!’, destinada al público juvenil, a las 18 horas, mientras que a las 21 horas será el turno para ‘Rompiendo a Leer’, para el público adulto. Las entradas se encuentran a la venta en la taquilla municipal situada en el propio Teatro Apolo y lo estarán también desde una hora antes del comienzo de cada representación. Tienen un precio único de cinco euros.

Pipirijaina es un grupo teatral, perteneciente a Fealta (Federación Almeriense de Teatro Aficionado), con tres años de historia, dividido en dos vertientes, Pipirijaina adultos, nacido de los talleres de teatro de la Diputación Provincial, impartidos por Mariano Sopedra, y Pipirijaina Juvenil que, instaurado por el propio Ayuntamiento de Nacimiento, está impartido por Tanit Sopedra.

‘¡Sorpresa!’ es un texto de Rafael Portillo, Tanit y Mariano Sopedra y ambienta el desarrollo de la obra en un piso estudiantil. Ante un sábado prometedor, la protagonista se dispone a pasar uno de sus más felices días, pero unas inesperadas visitas cambiaran el curso de la historia y desencadenarán una comedia alocada. Por su parte, ‘Rompiendo a Leer’ es una adaptación de ‘El florido pensil’ de Andrés Sopeña, “una invitación a la sonrisa; porque nos habla de un pasado aparentemente alejado de nuestra realidad actual. Quienes reímos recordando episodios de nuestra infancia en la escuela del franquismo también sentimos un escalofrío cuando pensamos en aquellos tiempos. Mediante la memoria histórica comprendemos el absurdo de un sistema educativo autoritario. Un absurdo incrementado por el paso del tiempo, pero que durante cuarenta años fue un dogma impuesto por la fuerza. Y padecido por quienes sentimos alivio al recordar con humor aquello que a tantos amargó”, explican.

No hay comentarios

Deja un comentario