La nueva ley de educación modifica el examen de Selectividad

La nueva ley de educación modifica el examen de Selectividad

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Los cambios en la Selectividad afectan a las universidades.

El Ministerio de Educación ha presentado el Anteproyecto de Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa, un texto que introduce modificaciones en la Ley Orgánica de Educación de 2006 y que, entre otras novedades, introduce un cambio en la Prueba de Acceso a la Universidad, que se sustituye por una evaluación final de Bachillerato de ámbito nacional.

El ministro, José Ignacio Wert, ha presentado esta modificación de la Ley para mejorar las cifras de calidad en el sistema educativo, uno de los peor parados en los estudios de la OCDE, a pesar de contar con un gasto por alumno de un 21 por ciento superior al resto de los países de la Unión Europea, según ha explicado el Ministerio en una nota de prensa.

La reforma espera poner coto al abandono escolar en este país, que alcanza el 26,5 por ciento, el doble de la media europea; terminar con la elevada tasa de jóvenes de entre 15 y 29 que ni estudian ni trabajan, que representa el 23,7%; así como mejorar las cifras de poblacion de entre 20 y 24 que ha superado la educación secundaria superior, un parámetro en el que España está por detrás del resto de países Europeos.

Entre las reformas propuestas por este anteproyecto de ley figuran la creación de una evaluación en tercero de Primaria para la detección precoz de dificultades en el aprendizaje; otra evaluación en sexto de Primara, sin efectos académicos, para comprobar el grado de adquisión de las competencias básicas; el establecimiento de una prueba final para la obtención del título de graduado en Educación Secundaria Obligatoria, que se realizará al final del cuarto curso de la ESO; se reducirán las vías de estudio en el Bachillerato, que quedarán reducidas a ciencias e ingeniería, ciencias de la salud, humanidades, artes y ciencias sociales; y se sustituye la Prueba de Acceso a la Universidad por una evaluacion de final de Bachillerato de ámbito nacional.

«La reforma que se plantea pretende ser gradualista, prudente y basada en el sentido común», ha explicado el Ministerio. «Su puesta en marcha requiere de diálogo para conseguir que, con las aportaciones de todos, seamos capaces de alcanzar un acuerdo que consiga el compromiso de alumnos, familias y profesores. Es fundamental que la reforma educativa sea sostenible en el tiempo, pues su éxito se medirá en función de la mejora objetiva de los resultados de los alumnos».

Próximamente dará comienzo el trámite de consultas e informes, en el que se prevé la presentación del Anteproyecto de Ley Orgánica, entre otros, a la Conferencia Sectorial de Educación, la Conferencia General de Política Universitaria, el Consejo de Universidades, el Consejo Escolar del Estado, el Consejo Superior de Enseñanzas Artísticas, el Consejo General de la Formación Profesional y el Consejo de Estado.

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