El paraje natural de Punta Entinas-Sabinar vive en esta época del añouna etapa de esplendor. En estasfechas coinciden en la zona prácticamentetodas las especies avícolasque a lo largo del año pasan porlos humedales. A principios deotoño permanecen todavía las avesestivales, comienzan a llegar lasinvernales y todavía paran a descansarlas migratorias, que sesuman a las sedentarias, que durantetodo el año viven en los humedalesejidenses.
Entre un mar de plásticos y a modode oasis surge el paraje naturalPunta Entinas-Sabinar, un entornonatural con una enorme riquezafaunística, donde se pueden encontrarunas 200 especies diferentesde aves, algunas de ellas en peligrode extinción. Esta zona de especial interés ecológicoy de reconocido prestigio anivel internacional se extiendedesde Almerimar hasta los iniciosdel término municipal de Roquetas.Se trata de un espacio naturalcon una longitud superior a los 15kilómetros y que se ha convertidoen refugio de aves de toda Europa.
El paraje de Punta Entinas-Sabinardestaca por su riqueza hidrológica.Aunque parezca una paradoja, lafalta de lluvias no afecta a los diferenteshumedales que se localizanen la zona. El doctor en Biología ytécnico de la Consejería de MedioAmbiente, Mariano Paracuellos,tiene una explicación muy sencillapara este fenómeno. Según estecientífico, los humedales están alimentadospor el agua sobrante delacuífero principal del Poniente.“Al regar los invernaderos, el aguase vuelve al filtrar y regresa a labalsa subterránea, de esta manerase produce un exceso, un sobrante,que reaparece en la zona dePunta Entinas y alimenta loshumedales localizados en el entorno”.
De ahí que en época desequía, este paraje natural se conviertaen un oasis que atrae a avesprocedentes de otros humedales deAndalucía, como de las lagunas deFuente de Piedra, en Málaga. “Enépocas muy secas, hay flamencosque se desplazan desde Fuente dePiedra para alimentarse en estoshumedales, llenarse la panza decomida para sus crías; van y vienenen el día y se pueden hacerunos 600 kilómetros en una solajornada”.
Los humedales son salobres, esdecir, agua con una poca concentraciónde sal. Entre las lagunas seencuentran algunas de mayor profundidad,que pueden llegar a losdos metros y medio, situadas en lazona más cercana a Roquetas, y lasque tienen una profundidad muyescasa, de unos 15 ó 20 centímetros,localizadas más cerca deAlmerimar.
Mariano Paracuellosdefendió esta zona como unlugar privilegiado para una tomade contacto con una buena variedadde aves. Es en esta época delaño cuando Punta Entinas-Sabinaralberga una mayor variedad deespecies avícolas. “En estas fechascoinciden aquí todas las especiesque a lo largo del año pasan por loshumedales”, destacó MarianoParacuellos. Por un lado estánlas aves estivales (que sólose encuentran en verano, escapandode los calores de África); a éstashay que sumarles las invernales,que llegaron huyendo del frío de los humedales del centro ynorte de Europa; además, las avesmigratorias que se ahora vuelven de Áfricahacen una parada para recuperarsey continuar el camino; y, porsupuesto, también se encuentranlas aves sedentarias que viven a lolargo de todo el año en los humedalesde este entorno.
El paraje natural alberga una riquezaavícola impresionante, pero enPunta Entinas hay mucho más.Mariano Paracuellos citó al impulsordel Parque Nacional de Doñana,Antonio Valverde, quien afirmabaque esta zona ejidense es“una Doñana en pequeño”. Esteentorno está dominado por dunasfósiles, sujetas por las raíces deentinas y sabinas (de ahí el nombre),que lo hacen muy peculiar,que comparte mucha similitud conDoñana. Se trata de una de laspocas zonas del litoral español enque se conserva esta riqueza natural,lo que le da un valor naturalmuy elevado.
Entre las especies que en estos díasse pueden ver por los cielos y loshumedales de Punta Entinas-Sabinarse encuentran zampullines ycormoranes, especies invernantes;garzas de diferentes clases; flamencos,que están establecidos enlos humedales de la zona, aunqueno crían en ellos debido a la especialdelicadeza de estas aves, quenecesitan de un entorno más solitariopara hacerlo; patos de diversasclases, también invernantes;fochas, entre las que se encuentrala focha cornuda, de la que sólohay unos 200 ejemplares en toda lapenínsula y se encuentra en peligrode extinción; algunas rapaces,como el aguilucho lagunero; lasaves limícolas, llamadas así porquesuelen desarrollar su actividaden los limos de las lagunas; gaviotasde diversas clases, como la picofino, en peligro de extinción; yaves esteparias y de carrizal.
Toda esta variedad de aves elevana unas 200 las especies diferentesque pasan por esta zona. Además, aesta riqueza avícola hay quesumarle la fauna terrestre o anfibiaque vive en este entorno. No esdifícil encontrar galápagos en laslagunas, sacando su cabeza paracazar algún insecto. Entre los reptilesabundan las culebras, tanto de agua como de tierra, siendo éstas últimas algo agresivas sise les molesta, y también hay unaimportante colonia de lagartos, queaprovechan las horas de sol deestas tierras para calentar su sangrefría. Entre los mamíferos queabundan en este entorno naturalejidense hay comadrejas, tejones,zorros, liebres y conejos.
El paraje natural de Punta Entinas-Sabinar vive en esta época del añouna etapa de esplendor. En estasfechas coinciden en la zona prácticamentetodas las especies avícolasque a lo largo del año pasan porlos humedales. A principios deotoño permanecen todavía las avesestivales, comienzan a llegar lasinvernales y todavía paran a descansarlas migratorias, que sesuman a las sedentarias, que durantetodo el año viven en los humedalesejidenses. 
