Antes de fallecer el pasado año, el escritor, historiador y periodista José Acosta Montoro había dejado dicho que a su muerte donaría a Suflí los más de 7.000 volúmenes de que constaba su biblioteca personal. Fue la promesa que le hizo al alcalde, Juan Cuevas, con la única condición de que Suflí tuviera para entonces una biblioteca pública municipal. Su voluntad se cumplió, y ahora el Ayuntamiento del municipio en el que pasó sus últimos días ha decidido devolverle el gesto, bautizando la biblioteca municipal de Suflí con el nombre de José Acosta Montoro.
José Acosta Montoro, Pepe Acosta como él deseaba ser conocido, había comentado en más de una ocasión que su ilusión era pasar sus últimos años en su pueblo, Suflí, una vez finalizada su extensa y reconocida vida laboral como periodista y redactor jefe de El Diario Vasco. Pepe no sólo cumplió su sueño de vivir en su pueblo y en su comarca, sino que, como había deseado durante muchos años, pudo devolverle todo su cariño en forma de investigación histórica, con la publicación del libro ‘El Valle del Almanzora durante el Islam (y Suflí al fondo)’.
Acosta Montoro llevaba por bandera su pertenencia a este pueblo del Almanzora y contaba ilusionado el honor que para él suponía vivir en la calle que lleva su nombre. Sin embargo, tenía también una visión de hombre de comarca y dedicó mucho tiempo a los Juegos Moriscos de Purchena. En esta parcela, se le reconoce una impagable labor como autor de la base histórica fundamental que ha hecho posible la celebración de los modernos Juegos.
Esta base histórica está recogida en sus libros ‘De Olimpia a Purchena’ y ‘Aben Humeya: Rey de los Moriscos’. Por ello, en el acto de homenaje celebrado en Suflí, el alcalde de Purchena, Juan Miguel Tortosa, entregó a David Acosta una placa otorgada a su padre por su participación y apoyo a los Juegos Moriscos. Juan Grima Cervantes, historiador, aportó una hermosa semblanza del periodista fallecido. El acto finalizó con la actuación de la cantante Sensi Falán, actividad que fue posible gracias a la subvención del Área de Cultura de la Diputación Provincial de Almería.
José Acosta Montoro fue durante muchos años redactor jefe de El Diario Vasco. En San Sebastián todavía lo recuerdan como autor de crónicas deportivas en los años más brillantes de la Real Sociedad, firmadas con el seudónimo de Luis de Andía. Pero además recibió premios de prestigio tanto en ensayo como en novela; y su obra ‘Periodismo y Literatura’ aún sigue siendo manual de consulta en las facultades de Periodismo. Una vez jubilado se retiró a Suflí, lugar de donde provenía su familia y donde fue nombrado hijo adoptivo.
