Una vez aprobado el plan, que saldrá adelante casi con total seguridad, habida cuenta de la amplia mayoría con la que cuenta el rector, Pedro Molina, estos trabajos serán asumidos por el personal funcinario.
«El ejercicio económico 2013 contemplará una reducción del 50% en estas becas primándose, como criterio selectivo para su eliminación, la antigüedad de las mismas», recoge el documento que hoy se somete al Consejo de Gobierno. Y es más, en el documento se explicita que en «determinadas áreas repetitivas cíclicamente, se promoverá la adquisición e implementación de medios electrónicos para la realización de los trabajos que habitualmente realizan los becarios».
El Plan de Eficiencia de la Univerisidad de Almería (UAL) será aprobado, este jueves, en el Consejo de Gobierno convocado para dar el espaldarazo definitivo a las medidas de ahorro adoptadas por el rector, Pedro Molina. Sin embargo, todo apunta a que no será el último, ya que el ahorro previsto en este documento está fijado en 2.941.000 euros, menos de la mitad de los 6,3 que la Junta de Andalucía ha decidido que debe ahorrarse la UAL, así que desde algunos foros han informado de que el próximo otoño llegará el plan definitivo, en el que previsiblemente habrá despido de personal funcionario.
La Universidad espera ahorrar 976.000 euros en personal docente investigador; 227.000 en personal de adminstración y servicios; en acción social, 350.000; 424.000, en cargos académicos; en retención por no disponibilidad presupuestaria dejará de gastar 574.000; mientras que 390.000 se ahorrarán en teléfono, agua, electricidad y ascensores.
Ya se viene hablando de los recortes que llegarán a la Universidad el próximo curso, sin embargo, a pesar de haber ofrecido algunas cifras, todavía no se contaba con un documento en el que se especificasen cada una de las medidas de ahorro.
El pasado 21 de junio se aprobó en Consejo de Gobierno una serie de medidas encaminadas al ajuste, básicamente las mismas que se sancionarán en este mismo órgano en la sesión del jueves. Sin embargo, en esa fecha no se facilitó documentación alguna de las actuaciones, y el rector recibió críticas por su oscurantismo, incluso hubo varios decanos que pidieron su dimisión.
