La economía andaluza continúa con su evolución negativa. Una nueva entrega de Analistas Económicos de Andalucía, realizado por Unicaja, prevé que el PIB andaluz registrará una caída del 1,6%, una cifra muy similiar a la prevista para el conjunto del Estado (1,5%). Almería, entre las provincias andaluzas en las que más se contraerá la economía.
El estudio prevé un nuevo descenso en todos los sectores de la economía, que será especialmente acusado en la construcción, con una caída del 6,5%; y la industria, que se contraerá un 4,2%; menos importante será el del sector servicios, que mantendrá un balance descendente del 0,5%, una caída igual a la registrada en 2012.
En estos datos influye la bajada en el consumo de los hogares de la comunidad, que Unicaja estima que será de un 3%, que será más importante en el gasto en consumo de administraciones públicas y de la inversión, del 3,9% y del 7%, respectivamente.
Descendiendo en el análisis, en el primer trimestre de 2013, todas las provincias andaluzas han registrado una caída de su producción, que ha oscilado entre el 3,4% de las de Huelva y Jaén, y el 1,9% de la de Málaga.
En lo que respecta a la ocupación, todas las provincias han experimentado en términos interanuales variaciones netas negativas, superando el 10% en las de Huelva y Jaén.
Las estimaciones para el conjunto de 2013 apuntan a una nueva contracción de la actividad económica, menos acusada en las de Málaga y Granada, en las que no superará el 1%. Por su parte, las provincias de Almería, Cádiz, Huelva y Jaén registrarán caídas de la producción por encima del 2%.
El empleo en Almería
La caída interanua del empleo ha sido del 4,9% en el primer trimestre del año, más acusada que en 2012, y la explicación que Unicaja da para este fenómeno es la reducción de la producción agrícola cernaca al 35,1%, lo que ha hecho que el sector agrícola haya empleado a 22.000 personas menos que el año anterior.
A pesar de los datos, dice Unicaja, el sector almeriense sigue teniendo un «elevado peso» en el conjunto andaluz, con alrededor de la quinta parte de los ocupados en la agricultura andaluza.
