Los nuevos valores musicales despidieron el festival Mare Musicum

Los nuevos valores musicales despidieron el festival Mare Musicum

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La III edición del Festival de Música y Danzas Antiguas de Roquetas de Mar (Mare Musicum) concluyó el domingo por la noche en el Anfiteatro con el Proyecto ‘Pequeñas huellas’ que reunió a jóvenes músicos de distintas nacionalidades que ofrecieron un espectáculo de canto, música y danza, con la ingenua y maravillosa música del Códice Trujillo del Perú, recopilada hace 230 años por el obispo navarro Jaime Martínez Compañón.

El repertorio elegido para ser interpretado por los niños integrantes del proyecto ‘Pequeñas huellas’ se centró en esta ocasión en una selección de las obras recopiladas por el Obispo Baltasar Jaime Martínez Compañón (Navarra 1735- Bogotá 1797) en Trujillo, Perú. Este obispo, educado en el ambiente de la Ilustración, de sólida formación y amplias inquietudes, recopiló en el período entre 1782 y 1785 una rica y variada información sobre su diócesis con el objetivo de remitir dichos datos a la Corona.

Desde la perspectiva de la Historia de la Música en Hispanoamérica, la obra de M. Compañón ofrece un corpus de diecinueve canciones, transmitidas en su momento por tradición oral y que son fijadas por este obispo en notación musical, hecho que ha permitido que lleguen hasta nosotros diversidad de tradiciones compositivas, instrumentos y lenguas de muy disímiles orígenes. Estas obras entran en relación directa con algunas de las acuarelas del códice, que incluso llevan idénticos títulos que las partituras.

Las obras seleccionadas van desde las danzas hasta las canciones, tonadas y bailes cantados en los que las denominaciones reflejan claramente la interculturalidad: cachua, tonada, tonadilla, cachuita, con temáticas que recorren de lo amoroso a lo navideño y que reflejan sin duda la tradición del barroco musical hispano en la que se había formado el Obispo M. Compañón.

Las melodías escogidas en el proyecto «Pequeñas Huellas» para el taller de interpretación y formar parte del concierto que los niños y jóvenes realizaron en el marco del III Festival de música antigua Mare Nostrum habían sido transcritas por Sabina Colonna Preti.

Joven Orquesta Barroca

El viernes la Joven Orquesta Barroca de Roquetas de Mar firmó una sensacional actuación en la iglesia parroquial de Aguadulce. Esta Orquesta comenzó su andadura en el curso 2007-2008, como respuesta a un especial interés, por parte del profesorado y alumnos, hacia la música barroca.

Dirigida por el profesor de violín Alejandro Torrente Toledano, esta joven agrupación ha buscado acercarse al género barroco a través de sus múltiples virtudes didácticas y pedagógicas, que hacen sin duda de la música de este periodo, una valiosa ayuda en la formación técnica y musical del alumnado. Los niños que integran la orquesta, han podido así desarrollar los recursos estilísticos del género, descubriendo un repertorio de excepcional belleza y dinamismo.

En la iglesia de Aguadulce ofrecieron un concierto dividido en dos partes. En la primera hicieron ‘Boureé’ de Elisabeth C. J. de la Guerre, ‘Te deum’ de Charpentier, ‘Concerto Grosso n3, op2’ (Movimientos I, II, IV) de Haendel, ‘Concierto Nº3 para 3 violines y orquesta’ de Michel Corrette y ‘Adagio’ de Albinoni.

En la segunda parte sonaron ‘Herr, wenn ich nur dich hab’ de Buxtehude, ‘Ay, triste que vengo’ de Juan de la Encina, ‘Que no puedo verte’, anónimo del siglo XVI, ‘Stabat Mater’ de Pergolesi, ‘Caro mio ben’ de Giordani y concluyeron con ‘Thou Knowest Lord the secrets of our Hearts’ de Purcell.

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