El interés por la bicicleta como medio de transporte no deja de crecer, y hasta las instituciones más reticentes a aceptarlo como una solución al tráfico y a la contaminación en las ciudades están cediendo ante la evidencia. Esto mismo le ha ocurrido al Ayuntamiento de Almería, cuya Concejalía de Movilidad ha visto con buenos ojos la posibilidad de convertir la calle Real en una ciclocalle, a propuesta del colectivo Doblefila.
Según informa esta organización, su proyecto de convertir esta arteria del Centro Histórico en una vía preferente para ciclistas ha tenido buena acogida en el Ayuntamiento, cuyos técnicos han «mejorado» el proyecto que presentó Doblefila, que en un principio aspiraba a unir el carril bici del Nicolás Salmerón, al abrir «la posibilidad de conectar la rambla de Amatisteros».
«En primer lugar tenemos que decir que agradecemos y valoramos la receptividad de María Muñiz -concejala de Movilidad- y la disposición de los técnicos municipales para afrontar la propuesta de forma constructiva», explican desde Doblefila.
Según les explicaron técnicos de Movilidad a esta organización, el acondicionamiento de la Calle Real supondría una inversión de 7.000 euros, que no estarían reñidos con otras actuaciones más ambiciosas en la ciudad relacionadas con la movilidad en bicicleta, como los grandes ejes Norte-Sur y Este-Oeste.
