El pescado decomisado lo componían cinco meros (dos grandes de unos tres kilos cada uno, dos medianos y una pequeño de unos 400 gramos), una gallineta de dos kilogramos y tres cigarras de mar. Los peces se han entregado a una institución benéfica y las cigarras, que carecían de daños aparentes, han sido devueltos al mar.
La delegada de Medio Ambiente, Sonia Rodríguez, ha destacado ‘la efectividad de la coordinación entre el servicio de vigilancia del ‘Punta Polacra’, los agentes de Medio Ambiente y la Guardia Civil’ y ha insistido en que ‘no podemos permitir, bajo ningún concepto, que personas que realizan prácticas ilegales, como es la pesca con arpón, esquilmen la fauna marítima del Parque Natural de Cabo de Gata-Níjar’. Sonia Rodríguez ha afirmado que ‘los meros son unos pescados muy codiciados por los aficionados a la pesca submarina’ pero ha recordado que ‘su captura está totalmente prohibida dentro del Parque Natural’.
El Plan de Ordenación de los Recursos Naturales del Parque Natural de Cabo de Gata-Níjar prohibe la pesca submarina dentro de la franja marítima de este espacio protegido. Además, tampoco está permitida la pesca de recreo de las especies ‘epinephelus guaza’ (mero), epinephelus costae (abadejo mediterráneo), sciaena umbra (corvallo) y umbrina cirrosa (verrugato).
Durante 2011 y los cinco primeros meses de 2012, los agentes de Medio Ambiente han interpuesto un total de 15 denuncias por pesca ilegal con fusil y se han decomisado 10 arpones.