Los vecinos del barrio de Torrecárdenas dieron anoche toda una lección de civismo ante la cerrazón del concejal de Salud del Ayuntamiento de Almería. Tras más de dos horas de debate sobre las ‘bondades’ del proyecto del crematorio los técnicos invitados por el Consistorio han reconocido que los hornos de estas instalaciones son una fuente de contaminación. Y ante las numerosísimas peticiones de los vecinos de que se trasladase el crematorio fuera de la ciudad, Carlos Sánchez se ha mantenido firme: “os pongáis como os pongáis el crematorio no se va a paralizar”. Eso después de que un vecino preguntase al miembro de la empresa si le firmaría un documento donde reconozca que nunca enfermaría a causa de las emisiones del Crematorio. El técnico de ASV Funeser dijo que eso no se lo podía garantizar. La reunión se inició sobre la hora prevista, y tras una charla del experto de la empresa constructora del crematorio llegaba la primera pregunta de los vecinos: “no queremos que nos venda su empresa, queremos que nos diga si el crematorio contamina, y si el concejal de Salud, nuestro representante, está dispuesto a escuchar a sus vecinos su petición de trasladar el crematorio fuera de la ciudad”. El concejal insistió, ni con 5.020 firmas en contra de dichas instalaciones, que son las recogidas hasta ahora por la Plataforma Contra el Crematorio, las obras se van a paralizar”.
Los vecinos le han recordado entonces la campaña de recogida de firmas que su partido, el PP, inició en 2006 en contra del crematorio de Huércal de Almería ¿Por qué su partido se oponía a ese crematorio argumentando su carácter contaminante y nos impone ahora éste? “Son cosas de la política”, responde el concejal Carlos Sánchez.
Los vecinos insisten en su batería de preguntas. “Nos sentimos insultados al tratarnos como a mercenarios diciendo que tras nuestras movilizaciones se esconden intereses comerciales. Es usted indigno de ser nuestro representante”, le echó en cara otro. Sánchez asegura que sus palabras han sido malinterpretadas, afirmando que nos estaban utilizando “otras empresas”.
Un momento tenso vino cuando un vecino le recriminó al concejal su sonrisa en varios momentos del acto. “Yo no me río, Sr. Concejal. No me ha pagado nadie por estar aquí. Lo estoy por la salud de mis hijos, y me parece una falta de respeto esa sonrisa que no borra de su cara ante las preocupaciones que le estamos manifestando”. Sánchez cambió entonces de pose y se mostró algo más respetuoso, sólo en las formas, eso sí.
De filtros, nada de nada.
El momento más tenso surgió en torno a la contaminación de los hornos. Tras varias semanas en las que el concejal ha vendido a la opinión pública que el Crematorio de Almería llevaría los filtros más avanzados de España, concretamente los que tiene instalados el de Barcelona, el técnico de la empresa ASV Funeser SLU dijo que el proyecto original no contemplaba los filtros porque no hacían falta. Pero que por exigencias de la Junta de Andalucía habían tenido que solicitar seis presupuestos a empresas distintas. Y ahí está la madre del cordero. Este experto asegura que han descartado tres, pero que no se han decidido por cuál instalarán. O sea, que del filtro del Crematorio catalán, nada de nada. Y la Plataforma cree que si el barrio no se hubiese levantado en protestas, los filtros ni se habrían ni contemplado.
Otra contradicción del técnico de la empresa se ha producido cuando se le ha preguntado dónde iban instalados los filtros, cuánto espacio necesitaban, si había que modificar el proyecto original, y el técnico de la empresa decía que había terreno de sobra y titubeando en varios aspectos técnicos sobre el tema.
El Ayuntamiento ha estado vendiendo a la opinión pública durante semanas que contaban con un informe favorable de la Consejería de Salud, dando a entender que las emisiones de la chimenea estaban avaladas por este organismo. Fuentes de esta institución aseguran que no han hecho ningún informe al respecto sobre emisiones, que sus informes no son vinculantes y que sólo tienen competencias en el suministro del agua, y en policía mortuoria. Aquí, la empresa dijo que no era Salud, sino Medio Ambiente. Y curiosamente, el técnico invitado por el Ayuntamiento reconoció ante los vecinos sólo estaba allí para comentarnos las referencias legales que regulaban la instalación de crematorios, pero que en ningún caso defendía que la ubicación fuese buena y que no contaminara. Un ingeniero de la Plataforma felicitó entonces a este experto por su declaración puesto que con sus palabras daba la razón a las preocupaciones de los vecinos.
Tras dos horas de intenso debate los vecinos en bloque le han preguntado al concejal de Salud por qué el Crematorio tiene que ir donde han decidido ellos. “Porque es donde nos han dicho los técnicos que es la mejor ubicación”. Y tras innumerables preguntas repetidas una tras otra pidiendo al concejal el traslado del Crematorio, negativas por respuesta.
Ni una palabra del proyecto de 2007 de D. Juan Megino de llevase el Crematorio fuera. Ni una palabra del informe de la predecesora en el cargo del Sr. Sánchez en el que pedía el traslado del cementerio y la construcción del crematorio en un lugar alejando de la ciudad.
Y ante la negativa del concejal a contestar a ninguna de sus peticiones, y asegurarles que “os pongáis como os pongáis el crematorio se va a construir aquí” los vecinos se levantaron en bloque y dejaron sólo a éste con el técnico de la empresa constructora del crematorio, y con un técnico de una empresa acreditada por la Junta para hablar de emisiones de las chimeneas del crematorio.
La reunión dio mucho de sí, pero el concejal de Salud del Ayuntamiento puso cara a un conflicto que va a ser largo, y cuyas acciones por parte de los vecinos va a ir aumentando en intensidad en las próximas semanas.
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