Esta empresa gallega que lleva en el sector energético desde 1981 analizará, si recibe el visto bueno de la Junta, analizará las posibilidades que para esta energía hay en terrenos de Sorbas, Lucainena de las Torres, Carboneras, Níjar, Cuevas del Almanzora, Pulpí, Tabernas, Gádor, Rioja, Pechina, Benahadux, Santa Fe de Mondújar, Huércal de Almería, Viator, Almería y El Ejido.
Todos estos puntos de la provincia pueden albergar bajo sus entrañas y a profundidades no muy altas fuentes de calor, que pueden ser transformadas en electricidad. Se trata de un tipo de energía renovable muy interesante, en la medida en que con un coste razonable, que supone llegar hasta el punto de calor, habría una fuente energética inagotable.
La razón de esta energía se encuentra en el hecho de que a medida que se profundiza en la corteza terrestre, la temperatura aumenta por término medio a un ritmo de tres grados centígrados cada cien metros.
Hay lugares en los que este gradiente térmico es más acusado, tanto como para generar energía eléctrica a profundidades de perforación económicamente viables. El proceso consiste en la generación de vapor mediante ese calor, un calor que más tarde hará funcionar la turbina que, al final del proceso, es la que genera la electricidad.
