Bajo la presidencia del alcalde Antonio Bonilla, se han celebrado en la sala de juntas del Ayuntamiento, la primera reunión de la comisión de trabajo encargada de presentar ante la Organización Mundial de la Salud (OMS) la inclusión de Vícar en el proyecto Ciudades Amigables con las Personas Mayores. Como ha señalado Antonio Bonilla, «ofrecer una respuesta local al fenómeno del envejecimiento demográfico, mejorando la calidad de vida tanto de las personas mayores, como del resto de la población, es uno de los objetivos prioritarios de la acción de este gobierno municipal, de ahí que debemos desarrollar políticas de carácter integral y promover la participación de nuestros mayores, involucrando tanto a los miembros de este colectivo como a los agentes locales y otros grupos, favoreciendo con ello el conocimiento de la realidad y la responsabilidad ciudadana».
Ciudades Amigables con las personas Mayores, es proyecto internacional destinado a ayudar a las ciudades a prepararse para dos tendencias demográficas mundiales: el envejecimiento rápido de la población y la urbanización creciente. El programa está dirigido a los factores medioambientales, sociales y económicos que influyen en la salud y el bienestar de las personas mayores. Para ello la OMS ha promovido la Red mundial de ciudades y comunidades amigables con las personas mayores, con el objetivo de crear entornos y servicios que promuevan y faciliten un envejecimiento activo y saludable.
La OMS consciente del progresivo envejecimiento de la población mundial, dirige este proyecto a todos los ayuntamientos interesados en promover el envejecimiento activo, mejorando sus entornos y servicios e incorporando esta perspectiva en la planificación municipal.
En la reunión a la que asistieron todos los agentes implicados en este proyecto, se presentó el trabajo previo realizado destinado a determinar los principales elementos del entorno urbano que facilitan un envejecimiento activo y saludable, no en vano una ciudad amigable con las personas mayores es una comunidad amigable con el envejecimiento, las políticas, los servicios y las estructuras relacionadas con el entorno físico y social del municipio, que se diseñan y reorganizan para apoyar y permitir a las personas mayores vivir dignamente, disfrutar de una buena salud y continuar participando plenamente en la sociedad de manera plena y activa.
En un principio se elaboró una guía con la participación de los mayores, que es el marco para evaluar la adaptación de las comunidades a las necesidades de los mismos, y donde se identifican ocho dominios de la vida urbana que pueden influir en la salud y la calidad de vida de las personas mayores: Espacios al aire libre y edificios, Transporte, Vivienda, Participación social, Respeto e inclusión social, Participación ciudadana y empleo, Comunicación e información y Servicios Sociales y de la Salud.
Las Fases de desarrollo del proyecto corresponden a un ciclo de cinco años, donde se realiza una investigación inicial para el diagnóstico de la situación, el plan de acción y su posterior implementación, y un proceso de seguimiento-verificación del cumplimiento de los objetivos y una valoración de los resultados.
En los primeros dos años se realiza la Planificación, en la que se debe lograr la participación de los mayores y los proveedores de servicios a través de los llamados Grupos Focales, se realiza una evaluación inicial de la adaptación del municipio a las personas mayores, se realiza el plan de acción trienal basado en los resultados de la evaluación, y se identifican los indicadores para seguir los progresos realizados.
En los siguientes tres años se elabora el plan de acción para que sea examinado y aprobado por la OMS, y si se obtiene se ejecuta el plan. Al final se presenta un informe sobre los progresos realizados que se evalúan con los indicadores identificados. Y se produce el siguiente ciclo de mejora continua.