Invertir en energías renovables parecía un negocio muy rentable y sobre todo muy seguro, sin embargo el tiempo y los cambios normativos en el sistema de primas hicieron saltar todo por los aires y dejaron a 600 familias almerienses atrapadas económicamente en este laberinto normativo.Se trata de datos barajados por la Asociación Nacional de Productores de Energía Fotovoltaica (ANIPER), que estima que en la provincia, al igual que en el resto del país, los cambios normativos que han llevado a reducir las primas a la producción de energía renovables ha transformado prósperos negocios en inversiones ruinosas, que todavía hay que pagar.
Ayer llegaba a Almería la campaña Camino del Sol, promovida por Aniper, para concienciar a los ciudadanos sobre la necesidad de impulsar un cambio del sistema energético hacia uno más sostenible, basado en las energías renovables.
El delegado de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo, Miguel Ángel Tortosa, visitó la campaña y declaró que Anpier y la Junta “coinciden en defender un modelo energético con mayor protagonismo de las renovables” y ha recordado que el Gobierno andaluz lleva años trabajando en este sentido “de forma consensuada con los agentes socioeconómicos, porque consideramos que es un sector estratégico para Andalucía”, incentivando la implantación de energías limpias, reduciendo los trámites administrativos para los proyectos de este ámbito y recurriendo “la errática reforma energética del Gobierno central, que está perjudicando el desarrollo de nuestra tierra y que en Almería ha supuesto la cancelación de 33 proyectos con 100 millones estimados de inversión y la paralización de otros 50 proyectos, además de un enorme perjuicio económico a los productores y empresas del sector”.