Rubén García se dedica a la Fotografía desde hace 10 años, aunque sería a partir de 2011 cuando las personas de la periferia de la sociedad comenzaron a copar su obra. Un ejemplo lo vemos en su exposición ‘Prostitución. Retratos de una vida en la calle’, que se pudo ver en el Centro Andaluz de la Fotografía hasta el pasado 22 de abril.
«Desde hace años me he sentido atraído por retratar a los grupos marginales de mi ciudad, y en especial, me llamaban la atención las prostitutas que veía cuando circulaba con mi coche por la ciudad. Un día, me acerqué a una prostituta en la calle y le pregunté si podía hacerle un retrato y ésta aceptó. Más adelante, otro día, me acerqué de nuevo al lugar y tomé unas fotografías a otra prostituta», nos cuenta Rubén. Así surgió este proyecto sobre la prostitución callejera en Almería.
Se trata de un tema con el que este fotógrafo ha estado en contacto desde su infancia: «crecí en el barrio de El Puche, uno de los dos barrios donde he realizado este trabajo sobre la prostitución callejera, junto con el barrio de Pescadería».
La confianza mutua es fundamental para la realización de estas fotografías: «hablé y tomé confianza con las prostitutas. Hice que se sintieran a gusto conmigo. Es entonces, cuando se relajaban, cuando les pedía que se mostrasen tal y como eran», nos cuenta Rubén.
Son fotografías que representan con muchísima dignidad a personas que frecuentemente se ven despojada de ella. «Me lo entregaban todo cuando posaban, incluso su alma interior, que quedaba reflejado en el retrato que les hacía».
Esta serie de Rubén García no es meramente descriptiva, sino que pretende dar voz a un colectivo que casi nunca la tiene: «las mujeres prostitutas sufren a menudo ataques de delincuentes, tienen severos problemas con las drogas, están indefensas ante los contagios de enfermedades venéreas, etc… Estas personas han estado siempre ahí, mostrándose en la calle ante nuestras miradas, pero nosotros les volvemos la cara».
Además de la exposición, se ha publicado un libro que condensa estas fotografías junto a entrevistas que el propio fotógrafo a realizado a las prostitutas. Leyéndolas vemos que muchas de ellas viven en la calle, noche y día, sin unas necesidades higiénicas básicas cubiertas. Rubén García asume, por tanto, su fotografía como un compromiso con estas mujeres; «siento la responsabilidad de enseñar esa realidad que apenas se conoce», asegura.
Según nos cuenta, el impacto al ver sus fotografías es profundo. Se genera un choque visual, pues estas personas tienen en su desnudez, en su rostro y en su aura marcadas las dificultades de la vida y los estragos de las drogas. «Sus rostros apenados y la desnudez de sus cuerpos deteriorados por la vida exhiben las marcas de la prostitución».
La exposición ha tenido en Almería una gran acogida por parte del público y los medios de comunicación. «He tenido muy buenas críticas y la reacción del público ha sido maravillosa, de hecho un montón de gente se ha quedado sin poder verla por la corta duración de la misma», nos asegura Rubén García. A la inauguración asistieron cerca de trescientas personas, entre las que se encuentran importantes figuras del mundo cultural almeriense, como Rafael Doctor, director del CAF; Beba Pérez, directora del Museo Arqueológico de Almería o Arturo del Pino, director de la Alcazaba, así como referentes de la fotografía como Enrique Sanz Ramírez y Carlos Pérez Siquier, Premio Nacional de Fotografía.
«Son imágenes muy duras, pero necesarias. Mirando las fotografías, la gente pensaba en las vidas de esas personas». Pero también nos interesa cómo se ven a sí mismas las prostitutas. Reciben las fotografías con tristeza y, a la vez, ganas de superación. «Al regalarle el libro a una de ellas, con lágrimas en los ojos me comentó: «este libro lo tendré siempre guardado en mi casa. Así podré verme en las fotografías y pensar en ello, en la mala vida que llevo. Me dará fuerzas para poder luchar y salir de este mundo«».
Rubén García ha realizado y participado en numerosas exposiciones: en 2011, en ‘Intercambio de miradas’ –con la Real Sociedad Fotográfica–, en la Place M2 Gallery de Tokio. También se ha podido ver su trabajo, entre otros espacios, en la Casa das Artes de Vigo (2013), en el Museo de Almería (2014, 2016 y 2017), en la Galería Railowsky de Valencia (2015), en el Centro de Arte Alcobendas (CAA) de Alcobendas (2015), en la Galería BAT Alberto Cornejo de Madrid (dentro del Festival Off de PHotoEspaña 2016) y, de manera individual, en el Centro Português de Fotografia (C.P.F.) de Oporto (2014), en la Llotja del Cànem de Castellón de la Plana (2015) y ahora en el Centro Andaluz de la Fotografía (CAF) de Almería (2018).