El Ayuntamiento de Roquetas de Mar no quiere ver colillas en sus playas. Con el lema ‘Por una playa más limpia’ y ‘Por la seguridad de los más pequeños’, la concejalía de Urbanismo y Playas ha iniciado una campaña de sensibilización y ha repartido unos 500 ceniceros y pulseras de identificación para los más pequeños. Los ceniceros que han repartido son ideales para recoger colillas, chicles y pequeños residuos que ensucian la arena y son difícilmente biodegradables. Y es que, por ejemplo, una sola colilla es capaz de contaminar unos 50 litros de agua.
Desde la Concejalía se ha hecho un llamamiento para que vecinos y visitantes tomen conciencia acerca de la necesidad de cuidar la playa y mantenerla limpia. Por otro lado, las pulseras de identificación para los más pequeños son resistentes al agua, y en ellas se indican el nombre y un teléfono de contacto.
