La Federación de Regantes de Almería (FERAL) reclama el estudio y ejecución de un plan provincial de infraestructuras que permita el aprovechamiento del agua de lluvia. Así, se evitaría que en una provincia que ya sufre sequía estructural haya millones de metros cúbicos de agua que se desperdician y van a parar al mar, como ha sucedido en los últimos días.
Dicho plan provincial de infraestructuras requerirá de la implicación técnica y económica de todas las administraciones (ayuntamientos, administración autonómica y administración central) competentes en la gestión hídrica para conseguir el objetivo común de aumentar a corto plazo los recursos disponibles para regadío y, al mismo tiempo, contribuir a la recarga natural de los acuíferos subterráneos que actualmente se encuentran sobreexplotados.
El aprovechamiento eficiente del agua que llevan a cabo históricamente los regantes almerienses dista mucho de la gestión pública de los recursos, en una provincia que tiene una dependencia cada vez mayor de la desalación. “Millones de metros cúbicos de agua no pueden ir a parar al mar por falta de previsión, ya que es una grave irresponsabilidad ambiental que suceda esto en una provincia seca y con la mayoría de sus masas de agua en mal estado”, según el presidente de FERAL, José Antonio Fernández.
Recogida de pluviales
A juicio de FERAL, la provincia de Almería necesita actuaciones dirigidas a facilitar la recogida de pluviales en las más de 30.000 hectáreas de invernaderos, cuyas estructuras pueden convertirse en colectores que canalicen el agua hacia balsas de regulación para su posterior aprovechamiento en riego o hacia el subsuelo para recuperar los acuíferos. En este sentido, se necesita contar primero con la regulación normativa de este sistema y después con ayudas económicas que faciliten a los regantes la incorporación de este modelo de aprovechamiento en sus fincas.
Además, es prioritaria la ejecución de diques y obras de contención en las principales ramblas con el objetivo de restar velocidad a las aguas torrenciales y facilitar que una parte del caudal se filtre al subsuelo. La situación que han provocado las intensas lluvias de este fin de semana pone de manifiesto la necesidad de mejorar la regulación de caudales en los principales cauces fluviales de la provincia, a pesar de que habitualmente discurran secos.
En tercer lugar, FERAL también reclama más inversiones para la construcción de pantanetas que almacenen el agua de lluvia para su posterior uso en el regadío. Actualmente, muchas comunidades de regantes de la provincia son deficitarias en embalses y no tienen medios para aprovechar las aguas pluviales por falta de infraestructuras.
Todas las actuaciones mencionadas son importantes para contribuir al mantenimiento de la renta en una provincia como Almería, donde solo el sector agrícola genera el 40% del Producto Interior Bruto. En este sentido, FERAL recuerda que el precio del agua de riego ya se ha encarecido un 7%* durante la campaña 2015/16, frente al 0,3% de encarecimiento medio del resto de los costes de producción que soporta una explotación familiar.