La línea de alta tensión desde Tabernas hasta Níjar para alimentar el AVE a Murcia podría afectar a especies como el águila real, el halcón peregrino o el águila perdicera, según denuncia el Grupo Ecologista Cóndor, y por este motivo ha pedido a la Junta de Andalucía que «exija competencias plenas en Medio Ambiente a la Administración central».
Las especies en peligro por estas obras serían, según el Grupo Cóndor, águila real, halcón peregrino, águila perdicera, ganga común, ganga ortega, alzacola, sisón común, avutarda común, alondra ricotí, aguilucho cenizo, murciélago grande de herradura, murciélago mediterráneo de herradura, murciélago ratonero peludo y tortuga mora.
Algunas de estas especies están incluidas en el Catálogo Nacional de Especies Amenazadas, el Libro Rojo de las Aves de España, el Libro Rojo de los Vertebrados de Andalucía y en el Catálogo Andaluz de Especies Amenazadas, en las categorías de «especies amenazadas» y «especies vulnerables».
«Estas líneas de cables suponen graves impactos a las aves, tanto por choque como por electrocución, suponen, además, un enorme impacto paisajístico en zonas naturales casi vírgenes, así como una red de caminos nuevos para el mantenimiento de las torres», dicen los ecologistas.
La alternativa que defiende el Grupo Ecologista Cóndor es que la línea de alta tensión «sea soterrada». En la misma nota enviada a la prensa, el grupo afirma que «no se opone al AVE, sino a los impactos que ocasiona y que se podrían evitar si se tuviera una mínima sensibilidad medioambiental».
Las obras de soterramiento aunque puedan parecer más costosas al ejecutarlas «son más rentables a largo plazo, porque evitan daños que con el tiempo se dan. En nuestra Provincia hemos tenido el ejemplo reciente del soterramiento de la línea de gas, que ha atravesado toda la Provincia de sur a norte, el impacto de la obra es incuestionable, pero se restaura adecuadamente casi no se nota», dice el Grupo Cóndor.