Se trata de una exposición colectiva de estas creadoras de dilatada trayectoria artística que, a pesar de las distintas visiones y formas de interpretar y ejecutar el arte que tienen, han realizado un proyecto común, que se convierte en una de las peculiaridades de la muestra. Este trabajo es el fruto de un constante diálogo entre ellas, consiguiendo un resultado coherente y muy interesante. Aunque podrá verse la obra individual de cada una, la obra “Retablo” que se presenta en la exposición, aúna el trabajo de las tres, un ejemplo de trabajo en colaboración y horizontal entre creadoras, que sirve de base para presentar al público sus últimas producciones, situadas entre las más sugerentes y penetrantes de la creación artística actual”.
Tal como señala la comisaria de la exposición, Tecla Lumbreras: “Tras muchos años de experiencia profesional, Pepa Caballero, Titi Pedroche y María José Vargas-Machuca están consideradas como tres de las artistas más relevantes de la escena artística malagueña. Sin embargo, su presencia continúa siendo una novedad en el panorama expositivo si la comparamos con la de otros artistas varones de su misma generación.
“EL RETABLO: PIEZA A SEIS MANOS”
A diferencia de otras colectivas anteriores, una de las singularidades de esta muestra consiste en la presentación por las creadoras de una obra en común. Siguiendo la estela de las ‘piezas a seis manos’ pintados por Andy Warhol, Jean Michel Basquiat y Francesco Clemente, durante seis meses las artistas trabajan de manera individual en pequeños lienzos, de veinticuatro por diecinueve centímetros, sin renunciar a un lenguaje artístico propio que va de la abstracción geométrica o matérica a la figuración. El resultado es un gran retablo, de setenta y cinco centímetros de alto por ocho metros de largo, con sugerentes combinaciones de color (rojos, azules, ocres y dorados), que aúna la pintura y el ‘collage’ imprimiendo al conjunto un carácter casi religioso.
LAS OBRAS EXPUESTAS
Un aspecto importante en la obra de Pepa Caballero (Granada, 1943) es el formato. La unidad básica son lienzos que, en ocasiones, se agrupan formando dípticos o trípticos que muestran variaciones de composición y color. O bien se presentan solos, a través de soluciones bicromáticas, azul-negro o rojo-negro. Otro rasgo esencial en nuestra creadora es el color. A veces los colores forman planos regulares sobre toda la superficie subrayando el carácter bidimensional del cuadro, y en ocasiones las superficies vibran gracias a las variaciones de los tonos. A pesar de que su pintura no es formalmente figurativa, la autora la conecta a sus observaciones sobre los cambios de luz en la naturaleza o la obra pública. O a obras concretas de la Historia del Arte. Sin embargo, si le preguntas sobre el significado último de sus cuadros, te contestará con la conocida sentencia de Frank Stella: «lo que ves es lo que ves».
Las»Entretelas», de Titi Pedroche (Valencia, 1942), constituyen un conjunto de dieciséis obras, realizadas entre 2008 y 2012, que parten de una forma de hacer característica en nuestra creadora. La textura de la tela asociada al plano y el color como elemento constituyente para la percepción espacial y la visión en profundidad. En su serie Palimpsestos, el lienzo deviene en un moderno manuscrito surcado por líneas horizontales de color que conservan rastros de una escritura anterior, a la manera de los estratos de un yacimiento. Pedroche insinúa levemente las huellas del pasado situando en la superficie su propio manifiesto. La influencia que el arte de otros artistas y otras culturas han tenido sobre ella, entre otros, los vibrantes campos de color de Mark Rothko o las caligrafías de Joan Hernández Pijoan, pero también las manifestaciones artísticas tradicionales del Norte de África e India, o el ceremonial cristiano.
Los recuerdos de la infancia y adolescencia están en la base de los trabajos actuales de María José Vargas Machuca (Málaga, 1949). Lejos de los lenguajes más abstractos de sus compañeras, la artista se mantiene fiel a sus narrativas figurativas bajo formas muy diversas. La mayoría de sus pinturas, entre 2011 y 2012, son recreaciones en blanco y negro de antiguas fotografías del álbum familiar, retratos de la artista, de su familia, de sus hermanos, de sus compañeras del colegio… Pero aclara que usa las imágenes como simples modelos para retratar las emociones e inquietudes que le provocan los motivos. De tal manera que el asunto trasciende su particular historia para convertirse en una semblanza general de esa etapa tan vulnerable del ser humano. Además están sus trabajos tridimensionales, esculturas de bulto redondo, cajas e instalaciones, donde Vargas Machuca manifiesta la vieja reivindicación vanguardista de integrar arte y artesanía.
TITI PEDROCHE
A partir de 1975, y durante tres años, estudia Historia del Arte y Dibujo en la Escuela de Artes y Oficios de Málaga. Realiza cinco cursos de Color, con Mariano Fernández Cornejo; y posteriormente, Pintura y Grabado en el Taller Casa de la Cultura de Fuengirola, dirigido por José María Córdoba.
PEPA CABALLERO
Estudia pintura y modelado en la Escuela de Artes y Oficios de Granada, en 1953. Durante 3 años, de 1965 a 1968, realiza la licenciatura de Bellas Artes en la Escuela Superior Santa Isabel de Hungría de Sevilla. Ha ejercido como profesora de dibujo durante diez años en diversos centros e institutos de Enseñanza Media de Granada y Málaga. Desde 1984 vive y trabaja en Málaga.
TETÉ VARGAS-MACHUCA
Estudió en la Escuela de Artes y Oficios de Málaga. Ha realizado trabajos de grabado en el taller Gravura y editado carpetas junto a otros pintores. Realizó un curso de talla en madera en la Escuela de Artes Plásticas y Diseño de San Telmo. También produce algunas obras en cerámica. Colabora con ilustraciones en revistas especializadas, carteles y portadas de libros como: Papeles de Poesía, Jarazmín, El Camaleón, Litoral, Feria del Libro de Málaga y Puente de Plata. En la última etapa combina la realización de esculturas y objetos de diferentes materiales con la pintura.
