“Abordamos estas obras solos, con recursos propios, porque está claro que no podemos esperar eternamente soluciones desde fuera, cuando de lo que hablamos es de seguridad, de avanzar en nuestros objetivos hacia una buena posición de competitividad social y medioambiental, ya que de ello también depende la imagen que proyectamos hacia el exterior tanto en beneficio de la agricultura, del turismo, como en la mejora de la calidad de vida de los vecinos de Níjar”, así ha explicado Esperanza Pérez Felices los objetivos esenciales de la puesta marcha de las obras del carril bici y las mejoras en el vial que une San Isidro y Campohermoso, dando una mejor y más sostenible movilidad a una población directa de más de 15.600 vecinos.
Las obras que inician las distintas fases del carril bici que unirá los dos principales núcleos por número de habitantes de la comarca, se ejecutan con una inversión de 2,4 millones de euros de fondos propios. Esta vía de 3,7 kilómetros configurada como ciclopeatonal, ya que tendrá zona de rodadura y para circulación de peatones, trata de sacar de la carretera AL-3111 los centenares de bicicletas que en uno u otro sentido realizan este trayecto diariamente.
La acción de gobierno supone una mejora directa en las condiciones de movilidad, “pero también actuamos sobre las medidas de seguridad en una vía con un tráfico muy denso con las dos rotondas que construimos nosotros, a la espera de que otras administraciones decidan intervenir en su mejora.
Para ayudarles a hacerlo hemos incluido el trazado en los planes de subvenciones que desde Europa se han articulado para preparar los territorios de cara a un futuro en el que la competitividad no se marca por el precio de los productos, sino por las condiciones generales que se dan en los lugares donde se producen.
Si otras administraciones provinciales o regionales no lo entienden, nosotros estaremos ahí para convencerles de ello pero, por ahora, con los recursos que tenemos actuamos sobre lo urgente, sobre aquello que no puede esperar más, que es la seguridad”, afirma la alcaldesa de Níjar.
La obra está contemplada dentro de los planes del equipo que dirige Esperanza Pérez Felices desde su llegada al ayuntamiento, pero ha sido en estos dos últimos años, cuando la situación económica fue equilibrada tras remitir la deuda heredada de 23 millones de euros, el momento en el que comenzaron a fraguarse proyectos, modelos de adquisición de los terrenos y la configuración de un diseño complementario a un futuro desdoblamiento de la vía.
Con la puesta en servicio del carril bici se cumplirá uno de los grandes objetivos del plan de movilidad comarcal que, por la especial configuración del territorio, el tipo de agricultura desarrollada en la zona, el modelo turístico que se persigue o la repercusión del Parque Natural, exige la implementación de este tipo de viales para cumplir con la exigencia de la UE de cara a poder acceder a nuevos fondos destinados a acciones de movilidad.
La alcaldesa y distintos miembros del equipo de gobierno han visitado el inicio de las obras junto con el personal técnico municipal y los responsables de las empresas que acometen las primeras acciones de movimientos de tierras.
El carril bici no es sólo la zona de rodadura para estos vehículos de dos ruedas, sino que incluye una completa red de servicios generales, alumbrado público, puentes metálicos para salvar las ramblas de Las Eras y El Pantano y rotondas que, al mismo tiempo, permitirán una mejor regulación del tráfico rodado. De este modo, lo cruces de Los Pelaos y El Omega pasan a convertirse en glorietas que aportarán mayor agilidad y seguridad a los conductores.