La Concejalía de Medioambiente, Ordenación del Territorio y Patrimonio del Ayuntamiento de Roquetas de Mar, que dirige el concejal José Luis Llamas, ha iniciado los trámites para declarar la Ribera de la Algaida como Parque Periurbano, «primer paso para su habilitación como espacio de uso de esta zona privilegiada que posee un gran valor medioambiental», anuncia el concejal.
Tal como recuerda Llamas, el PGOU de Roquetas de Mar ya contemplaba que este espacio, clasificado como suelo no urbanizable, estaría destinado a su habilitación como parque, con la denominación de Parque comarcal de Roquetas de Mar -Salinas de San Rafael, de 646.949 m2 de extensión.
«Se trata de un espacio que tiene una ubicación estratégica, en pleno litoral y entre los núcleos urbanos de Aguadulce, El Parador y Roquetas, y con gran singularidad e interés, no sólo ambiental sino también cultural y etnográfico», subraya el edil.
Como humedal, la Ribera de la Algaida fue incluida desde la Dirección General de Gestión del Medio Natural y Espacios Protegidos en el Inventario de Humedales de Andalucía, en agosto de 2018, que determina el fomento y la ejecución de proyectos y el desarrollo de propuestas vinculadas a la conservación y el aprovechamiento racional de los recursos naturales, de acuerdo con los principios generales del desarrollo sostenible, y a la dotación y gestión de instalaciones y servicios de uso público así como el desarrollo de acciones de educación ambiental y participación social y la realización de campañas de divulgación y sensibilización.
«En este marco, desde el Ayuntamiento de Roquetas de Mar iniciamos este trámite para su declaración como Parque Periurbano que nos permita convertirlo en un espacio accesible y disfrutado por todos en toda su extensión, convirtiéndolo así en un atractivo turístico de primer nivel», afirma José Luis Llamas.
La Concejalía informará sobre esta propuesta a todos los grupos políticos de la corporación en la Comisión Informativa de Desarrollo Urbano del próximo lunes, antes de que sea aprobada definitivamente en Junta de Gobierno.
Tras la aprobación, se abrirá un plazo de participación pública durante el que el concejal tiene previsto convocar a las asociaciones roqueteras que trabajan por la preservación del medioambiente para que puedan hacer sus propuestas y establecer de forma conjunta las necesidades del espacio, antes de redactar un proyecto.
«El objetivo es que todos los colectivos y ciudadanos que así lo deseen participen en la configuración de un programa de actividades de carácter educativo, cultural, científico o de ocio, compatibles con la conservación y restauración de los hábitats del futuro parque periurbano, que sería el segundo parque de estas características de la provincia de Almería, junto al parque de Castala», dice José Luis Llamas.
El concejal responsable de Medio Ambiente incide en que «el principal reto del parque periurbano es compatibilizar y buscar el equilibrio entre la función recreativa del espacio y la protección y conservación de los hábitats naturales y de la fauna y flora silvestres, respetando sus valores medioambientales y estableciendo las limitaciones necesarias para que el aprovechamiento recreativo del espacio no suponga un riesgo para las especies silvestres y sus hábitats o interfieran en la reproducción u otros procesos biológicos esenciales pero sí cuente con equipamientos adecuados, tales como senderos o miradores, para su utilización por parte de la población «.