Un presente optimista y un futuro incierto. El quinto Barómetro de Situación Económica realizado por el Colegio de Economistas y del Colegio de Titulares Mercantiles de Almería refleja que la valoración de la situación actual ha seguido mejorando y ha superado las expectativas, lo que apoya la idea de un buen momento en el que aumenta la incertidumbre con respecto al futuro. Un 43% de los economistas y empresistas almerienses encuestados opina que la situación ha mejorado durante el segundo semestre del año, frente a un 2% que se muestra pesimista. Con respecto a hace 6 meses, aumenta el optimismo y el pesimismo se sitúa en mínimos.
En lo que respecta a las expectativas, estas arrojan un empeoramiento de la situación. Las opiniones optimistas retroceden desde el 47 % anterior hasta el 35 % actual, aunque el descenso ha ido a engrosar el sector de los que piensan que la actividad se mantendrá estable.
El informe, que ha sido presentado los presidentes de los Colegios de Economistas y Titulares Mercantiles, Ana Moreno y Francisco Jesús Sierra, respectivamente, por el economista David Uclés y el profesor y secretario Carlos J. Cano, apunta por tanto a un ambiente inversor retrotraído con respecto a hace seis meses.
Los factores retardadores de la actividad “son ya más propios de una economía en clara expansión”, explican. Para el 70% de los encuestados la insuficiencia de la capacidad instalada es uno de los principales problemas desbancando claramente a la debilidad de la demanda, que ha pasado de ser el primer factor en el pasado barómetro con 75,8% a el cuarto con un 23,3%. Las dificultades de financiación han aumentado ligeramente, manteniéndose como el segundo problema de la economía provincial, mientras que la escasez de personal cualificado es un factor retardador para el 25% de los encuestados. En este semestre se ha detectado en el conjunto de respuestas de libre enunciación (otros) una gran coincidencia en relación con la falta de infraestructuras de comunicaciones que se ha convertido en un problema para el 10 % de los economistas y empresistas.
El quinto barómetro arroja una continua mejora significativa en la valoración de los sectores más dañados en el momento más crudo de la crisis, como la construcción y el comercio menor. De los sectores que se consideran en la encuesta, tres han mejorado y tres han retrocedido en su valoración actual. Agricultura (3,71), turismo (3,71) y transporte (2,88) han retrocedido ligeramente, produciéndose un “empate” entre los dos primeros de ellos y culminando por tanto el proceso de convergencia que se apuntaba en semestres anteriores. Los tres que han mejorado han sido el comercio menor (2,80), construcción (2,00) y piedra natural (2,60). El efecto conjunto de estos movimientos es que se están acercando las valoraciones de todos los sectores. Hay que resaltar el comportamiento de la construcción que, semestre tras semestre, sigue mejorando, aunque aún sigue lejos del resto.
En cuanto a los precios, la situación se mantiene prácticamente invariante con respecto a hace seis meses. Se augura un entorno de precios estables, a pesar del mantenimiento de las medidas de política monetaria ultraexpansiva tomadas por el BCE.
Estructura de Gobierno
Dado que la encuesta se ha realizado poco después de la celebración de las elecciones generales del 20 de diciembre, la pregunta variada de cada barómetro hacía referencia sobre cuál es la estructura de gobierno que consideraban más beneficiosa para la economía española. En relación a esto, algo más de un tercio de los encuestados cree que el núcleo del Gobierno se debe estructurar en torno a un pacto PP-C´s (35%), aunque casi otro tercio considera que lo mejor es que se produzcan nuevas elecciones (32%). La tercera opción preferida es la de un pacto PP-PSOE (18%), mientras que la alternativa de Gobierno en torno a un pacto PSOE-Podemos queda con un 12 % de las preferencias.