La historia de María García Torrecillas estuvo marcada por la huida. La vida de esta mujer estuvo marcada por la Guerra Civil y tuvo que exiliarse a Francia, donde se convirtió en el ‘ángel de la guarda’ de cientos de españolas, a las que ayudó a parir. Esta mujer ejemplar falleció hace cinco días en México, a los 97 años de edad y mañana sábado se le rendirá un homenaje en Albanchez.
María García Torrecillas sufrió, como muchas mujeres anónimas, la guerra, el fascismo y el exilio, y, como ellas, sobreponiéndose al sufrimiento, dio ejemplo de coraje y amor al género humano.
Su vida ha estado marcada por sucesivas migraciones y exilios. A Barcelona primero, en busca de trabajo; a Francia después, cruzando la frontera junto con medio millón de españoles; a México finalmente, que la recibió con los brazos abiertos.
En los años del exilio francés, trabajó como enfermera en la Maternidad de Elna, una «isla de humanidad en medio del infierno» dirigida por Elisabeth Eidenbenz, en la que nació su hijo.
Allí desarrolló una labor humanitaria excepcional, pues ayudó a salvar de la muerte a 600 niños, en su mayoría hijos de exiliadas españolas, y protegió y ocultó a madres judías perseguidas por los nazis.
Su vida, marcada por la lucha por la supervivencia, es también, un ejemplo de solidaridad y amor a la vida, méritos que en 2007 le valieron la Medalla de Andalucía.
Para mañana, el Ayuntamiento de Albanchez, lugar de nacimiento de María García Torrecillas, ha organizado un acto en el que intervendrán la profesora de Educación, Enfermería y Fisioterapia de la Universidad de Almería, Carmen González; el profesor y catedrático de Historia Contemporánea en la Universidad de Almería, Fernando Martínez; la ex senadora por Almería, Martirio Tesoro y una sobrina de la homenajeada y que trabaja en el Archivo de la Universidad Autónoma de Madrid, Mari Carmen García.