Ernesto Alterio, Ana Erdozain, Sara Manzanos, Chevi Muraday, David Picazo, Maru Valdivielso y Alberto Velasco. Siete actores para siete personajes que desde el punto en común de la huida se encontrarán y necesitarán en el desarrollo de ‘En El Desierto’, la obra de danza y teatro multidisciplinar que se representará en el Auditorio Municipal Maestro Padilla el sábado, 24 de octubre, a partir de las 21.30 horas, dentro del ‘Otoño Cultural’ programado por el Área de Cultura y en colaboración con Platea, el Programa Estatal de Artes Escénicas.
Las entradas se encuentran a la venta en www.almeriacultura.com y en la taquilla municipal del Teatro Apolo y también lo estarán en la propia taquilla del Auditorio desde una hora y media antes del comienzo de la representación. Tienen un precio de entre 15 y 18 euros y cuenta con servicio gratuito de ludoteca para niños de entre 3 y 12 años, realizando reserva previa en el teléfono 950 089 298.
La unión hace la fuerza
‘En El Desierto’ es una producción de la compañía LosDeDae que parte de una idea original del Premio Nacional de Danza, Chevi Muraday, y que también se encarga de la dirección artística y coreográfica. La dirección teatral está realizada por Guillem Clua que, como Plablo Messiez, también es autor de varios de los textos. Los personajes de la obra van hacia un lugar incierto. Huyen porque fueron expulsados de su lugar de origen y en la huida se cruzan, se encuentran. Les une la necesidad común de resistir. Descubren que sosteniéndose los unos a los otros evitarán desaparecer.
El cambio y la incertidumbre por el devenir es todo el presente. Sobrevivir, no transigir. Avocados a la nada, con lo poco que han podido conservar en la huida. Conviven, tienen que permanecer juntos para sobrevivir. Un estado de excepción, interno y universal. Un diálogo en el que las voces tienen que dejar atrás la desconfianza, el recelo, la estridencia de lo que han sido para dejarse llevar por el susurro del objetivo común, para unirse en un silencio de vida que pasa por la muerte misma. Como una manada de animales heridos que no matan muriendo, que se lamen las heridas para hacerse invencibles.
