La temporada alta en Roquetas de Mar ha superado todas las expectativas, sobre todo, teniendo en cuenta la situación de incertidumbre con la que se inició la época estival debido a la pandemia.
Desde el Ayuntamiento, a través de la concejalía de Turismo y Playas, muestran su satisfacción por los datos que se reflejan en el informe realizado por la plataforma Turobserver, correspondientes al mes de septiembre. Según el análisis del destino, a través de Smart Data, la temporada alta en Roquetas de Mar ha consolidado una demanda muy positiva liderada por el mercado nacional.
El concejal de Turismo y Playas, Francisco Barrionuevo, ha explicado que “se ha podido constatar que un gran número de nacionalidades, aun siendo la cuota muy pequeña, siguen muy interesadas en nuestra localidad”. “No en vano, la tendencia nos muestra que el destino ha podido mantener precios por encima de otros destinos vacacionales, en concreto, más del 60% de los visitantes han mantenido las estancias por encima de las 3 noches”, señala Barrionuevo.
Turismo internacional
Los datos del mes de septiembre ofrecen indicadores reveladores en relación con las tendencias que, con total probabilidad, se impondrán en el futuro más inmediato. En este informe, se destaca cómo el mercado británico, francés y portugués, tradicionalmente muy importantes para el turismo de nuestro país, han ganado presencia y recobrado cierta relevancia durante el último mes de la temporada estival.
También, se han apreciado cambios sustanciales en lo relativo a los perfiles de visitantes, entre los que, paulatinamente, comienzan a imponerse los viajes en pareja, individuales y en grupos, por encima ya del turismo familiar, claramente más extendido durante los meses anteriores.
Cabe destacar que el alquiler vacacional obtiene una puntuación de 9.5, siendo el destino mejor valorado frente a los competidores en este sentido. Quizás la noticia más positiva llegue de la mano de la turoperación internacional ya que durante el pasado mes de septiembre se mantuvieron activas sus operativas contribuyendo así a la sensación generalizada de “optimismo cauteloso”.