El Tribunal Supremo da luz verde al proyecto de urbanización en terrenos de La Fabriquilla, en el Parque Natural Cabo de Gata-Níjar, donde hay proyectada la construcción de 150 viviendas, a pesar de que el suelo está sujeto a protección y regulación espacial por su diversidad biológica y paisagística, según la normativa ambiental andaluza.
A pesar de esta clasificación, las Normas Subsidiarias de Níjar reconocen estos como aptos para urbanizar, por lo que los propietarios promovieron un plan para urbanizar la zona que fue aprobado por el Ayuntamiento, que más tarde fue denegado.
Los propietarios interpusieron un recurso contra un auto del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), que dio la razón al Ayuntamiento de Níjar, que en 2008 rechazó la aprobación definitiva después de que la Consejería de Medio Ambiente informase desfavorablemente, por el grado de protección de la zona.
El Alto Tribunal subraya que la plena ejecución «no termina con la mentada clasificación sino con la posibilidad real y efectiva de urbanizar el citado suelo» y que el fallo de 1997 «resulta estéril» si la administración impide «el desarrollo urbanístico».
Añade, en esta línea, que el TSJA se contradice porque reconoce que la administración «ha persistido en su actitud de contradecir los derechos de la ejecutante ya adquiridos por sentencia firme» pero da prevalencia a la aplicación del Plan de Ordenación de Recursos Naturales (PORN) del parque natural de Cabo de Gata-Níjar, que considera ‘La Fabriquilla’ espacio protegido.