El certamen de guitarra clásica Julián Arcas ha cambiado de fecha, en vez de celebrarse entre los meses de junio y julio, esta edición se ha pasado al mes de noviembre y llegará con una importante novedad, como es el estreno de ‘La mujer de la sombrilla’, una ópera compuesta por Juan Cruz Gevara y cuyo libreto firma Francisco Joaquín Cortés.
La Fundación Cajamar ha publicado las bases para participar en el certamen internacional de guitarra, que se desarrollará del 4 al 19 de noviembre. El Certamen está dirigido a todos los intérpretes de guitarra clásica, y su finalidad es fomentar el estudio y conocimiento de dicho instrumento.
El Certamen se compone de tres modalidades: la primera, hasta los 13 años de edad (nacidos a partir del 1 de enero de 1998), la segunda, hasta los 18 años (nacidos a partir del 1 de enero de 1993) y la tercera es la modalidad absoluta (sin límite de edad). Los concursantes sólo podrán presentarse a una de las modalidades del Certamen.
El Concurso de la primera modalidad se denomina Antonio de Torres, el de la segunda se denomina José Tomás y sólo el de la tercera modalidad tendrá la denominación de Julián Arcas.
‘La mujer de la sombrilla’
Por otro lado, dentro del certamen de guitarra clásica se ha incluido una cita muy especial, como el estreno de la ópera ‘La mujer de la sombrilla’, una ópera cien por cien almeriense, cuya música ha compuesto Juan Cruz Guevara y el libreto ha sido realizado por Francisco Joaquín Cortés.
Esta ópera aborda el problema del Alzheimer desde una perspectiva muy original. Se trata de un proyecto atrevido y contemporáneo, que sorprenderá tanto por su puesta en escena, donde tienen cabida los contenidos audiovisuales, así como por la calidad y la solidez de la música.
‘La mujer de la sombrilla’ es una ópera de cámara a dos voces: Olvido, que es la protagonista; y el narrador de la historia. Todos ellos se acompañan de la flauta, el acordeón, algo muy extraño en la ópera, la percusión y violonchelo.
Para el autor del libreto este proyecto ha sido todo «un reto, porque, a pesar de que he publicado varias obras literarias, nunca me había enfrentado a hacer un libreto de ópera. El resultado del libreto ha sido bueno, he quedado muy contento».
