En la actualidad, apuntaba el responsable de la CEA, la mayor parte de las empresas andaluzas está constituidas por trabajadores autónomos (una de cada dos) y 9 de cada diez tienen menos de 10 trabajadores en nómina. Por otra parte, ha señalado que en el ranking de las 50 principales empresas que operan en Andalucía, aproximadamente una veintena son de capital propiamente andaluz. Entre las más relevantes ha destacado algunas como Cosentino, Abengoa, Sando, Covirán, Hojiblanca, etc…, que forman parte del llamado ‘núcleo duro’ de la economía andaluza.
Igualmente, ha ofrecido datos como que en la comunidad autónoma prevalece el empresario individual sobre la figura societaria y que 4 de cada 5 operan en el sector servicios. Entre lo más destacado, el comercio, los servicios de asesoramiento y consultoría, el turismo y la hostelería, el transporte y el sector educativo. A estos sectores se están incorporando paulatinamente las nuevas tecnologías y el vinculado con la prestación de servicios que contempla la Ley de dependencia.
“Las empresas andaluzas de hoy nos se parecen en nada a las de los primeros años de la transición. Nuestra sociedad ha protagonizado un cambio muy importante: hemos pasado del subdesarrollo a ser una de las regiones más dinámicas de Europa (en España, Andalucía engloba al 15% del total de las empresas, sólo por detrás de Cataluña). Esperemos que las consecuencias de la crisis no supongan un desmantelamiento del sector productivo”, señalaba Carrillo, que ha destacado también en su intervención el papel fundamental que han desarrollado a lo largo de los últimos 30 años las organizaciones empresariales.
Con todo, el secretario general de la CEA afirmaba que aún siguen quedando muchos frentes por resolver, como los cobros por parte de las empresas, el retraso en el pago de las administraciones y las dificultades de acceso a los préstamos bancarios. También, que siguen existiendo muchas trabas burocráticas que alejan a Andalucía de los rankings internacionales de creación de empresas. Aún así, ha animado a los jóvenes a que sean emprendedores y pongan en marcha ideas de negocio. “Todos tenemos grandes esperanzas en el Plan de Fomento de la cultura emprendedora. Estoy seguro que dará buenos resultados”.
