Por Ana García García. Foto: Inga Kevenaite
Con la plaza Vieja con un lleno completo, como era de esperar. Miguel de Poveda inauguró el festival de Flamenco de Almería. Con un público impaciente y emocionado, Miguel, no defraudó. Amante del verso y la literatura, con su registro de voz tan característico, entusiasmó a un público entregado al que puso en pie en varias ocasiones, entre ellas en una canción homenaje a Enrique Morente.
Presentando su último disco, y sin olvidar sus clásicos temas, siendo consciente de que el Festival es un homenaje al flamenco, deleitó a su público con versos de Alberti, Lorca, letras de Sabina y además recordó éxitos de Camarón, así como clásicas bulerías y fandangos. El público vitoreó al artista, no faltaron los “oles” y el arte de muchos espontáneos, que, cuando el artista como es habitual, se entregaba en el escenario, no podían evitar bailar y palmear al son de su música.
Hizo sin duda, que la apertura del festival, se convirtiese en un elenco incomparable. Entregado y pasional sobre el escenario, con su arte innato y su duende, no olvidó sus alegatos contra la guerra, su compromiso con el arte andaluz y su homenaje a grandes artistas que ya no están.
Cercano a su público, Miguel hizo que el Festival de Flamenco, no pudiese tener un mejor estreno.
