En fecha reciente 24 febrero se clausuraba en Almería el encuentro de trabajo del proyecto europeo URBACT-LINKS. Estas sesiones son importantes ya que permiten el conocimiento de las diversas actuaciones y realidades que se están haciendo en los diferentes Cascos Históricos europeos. Este proyecto es un programa europeo de cooperación territorial que está en vigor en el período 2002-2013 y que pretende promocionar el desarrollo urbano sostenible, apoyando proyectos que abran las perspectivas y busquen soluciones de la rehabilitación urbana integradora.
Y me ha llegado la noticia que, precisamente, en Vera, este mismo día se iniciaba otro encuentro similar de Encuentro Permanente de Ciudades Históricas del Mediterráneo, un acontecimiento de interés internacional que va a reunir a expertos y técnicos, así como diversas autoridades. Ciudades del arco Mediterráneo con un punto en común: su patrimonio histórico, que ha sido la elegida para la celebración del décimo Seminario de la Conferencia Permanente de las Ciudades Históricas del Mediterráneo. Representantes técnicos y políticos de municipios de países de la ribera mediterránea suele acudir a esta anualidad de encuentros para poner en común las actuaciones que realizan en torno a su patrimonio cultural así como los retos que se les presentan en su economía en torno a ese patrimonio.
En estas importantes citas se dan a conocer los retos y desafíos en los que estos municipios pueden colaborar para poner en valor sus conjuntos históricos, difundirlos y explotarlos así como ver qué impacto socioeconómico puede conllevar este trabajo.
Y aprovechando esta coyuntura de frenética actividad planteamos unas argumentaciones para unos `considerandos´.
Estos encuentros nos llevan a reflexionar, como expertos en Patrimonio, en la necesidad de elaborar planes de acción que guíe la elaboración de proyectos coordinados y asesorados por expertos de todas las materias que afectan al urbanismo y al Patrimonio.
Sobre esta temática llevamos argumentando desde la década de los 80 del pasado siglo en los medios de comunicación, cuyos artículos publicados ahora serían perfectamente vigentes con dicha problemática. Ver por ejemplo los temas de artículos de prensa del que suscribe, entre otros: “Recorrido por las construcciones de la etapa medieval”, diario Ideal, 2 mayo de 1985, p. 22; “El espacio urbano en la ciudad. Rehabilitación de la arquitectura tradicional almeriense”, diario Ideal, 18 de abril de 1991, p.17; “Almería y sus pueblos: problemática urbanística”, diario Ideal, 11 de mayo de 1991, p. 15; “Reflexiones sobre el casco antiguo y arquitectura tradicional almeriense”, revista Nivel, Colegio de Arquitectos Técnicos y Aparejadores de Almería, nº 53, 1992, etc.…
Un proyecto fundamental para el desarrollo socio cultural y turístico de cualquier ciudad con una mínima infraestructura de casco antiguo, ya sea de internes histórico, artístico o etnológico, es la creación de un Plan de Acción para reforzar estos urbanismos antiguos como referente de una proyección turística y a la vez social, basados en la conservación de los espacios histórico-culturales, verdadero valor añadido de cualquier ciudad.
Las actuaciones a contemplar no sólo serían de carácter administrativo sino también privado, para revitalizar los “abandonados” cascos antiguos que unificaría la dualidad urbana y la unidad cultural. La colaboración publico-privada es fundamental, con rehabilitación de las viviendas que conforman las señas de identidad del urbanismo antiguo, iluminación, creación de centros de interpretación de la evolución histórica de la ciudad, con un conjunto de medidas con una intensa colaboración entre profesionales urbanistas e investigadores, con el objetivo de diseñar el proyecto más adecuado a las necesidades y expectativas de la ciudad. Esta iniciativa busca lograr el aprovechamiento óptimo del extenso potencial que se acumula en estos espacios urbanos.
Para la dimensión cultural está la creación de una Red de Cascos Históricos como Museos al aire libre, requiriéndose de un manifiesto en defensa del patrimonio arqueológico y arquitectónico integral de estas ciudades. Se hace necesario un análisis de sus valores y significados de la ciudad histórica, desde una mirada multi y pluridisciplinar, con protocolos y procedimientos para su protección y gestión. Unos proyectos de valoración a nivel de conservación, mantenimiento y conservación, con actuaciones integrales, que permita la participación de un equipo permanente de especialistas, entre arqueólogos, historiadores, geógrafos urbanistas, antropólogos, arquitectos y otros colectivos, que consideramos fundamental para su conocimiento y conservación, con protección de áreas arqueológicas y monumentales, restauración conservación consolidación y rehabilitaciones acordes con los criterios de la Carta de Venecia.
La adecuada valoración de un conjunto urbano de carácter histórico exige una acertada política de conservación especialmente de restauración; y esta debe ser flexible para cada actuación, dependiendo de su estudio científico y de la política de puesta en valor de lamisca, con estudio previos de toda la documentación histórica, arqueológica y antropológica de la ciudad existente, para su estudio global, que sirva de guía para las obras nuevas y creación de infraestructuras, clasificación de itinerarios, señalización, sensibilización ciudadana, etc.,; y, sobre todo, del pasado fundacional, que determina el origen de la ciudad y sus señas de identidad; la protección de áreas arqueológicas y su puesta en valor visitable para el turismo y la ciudadanía, integradas en áreas verdes…
Todos ellos procedimientos para su protección y gestión del medio urbano; un largo camino hacia l a rentabilidad real del Patrimonio Urbano.
Igualmente existe una representación del Patrimonio cultural urbano desde una a mirada antropológica.
Otro factor a tener en cuenta es la intervención en el patrimonio construido, como un agente dinamizador para la protección del Patrimonio Cultural de la ciudad. Para ello, también se requiere de unos instrumentos de la administración municipal para la protección del mismo, sin discursos fragmentados, con un planteamiento urbano en equipo, para crear un efecto dinamizador a las intervenciones singulares en el Patrimonio arquitectónico, para que el sector turístico disponga de la oferta cultural, que aún siguen planteando problemáticas.
Las intervenciones en destinos patrimoniales desde la perspectiva turística deben ser coordinados/asesorados por técnicos en Patrimonio Cultural cualificados para una efectiva dinamización.
Y otras formas de promoción y proyección de conocimiento del Patrimonio Cultural en las ciudades históricas, es la dinamización del Patrimonio Cultural a través de las instituciones museísticas.
Y todo este conjunto de consideraciones reúnen, a nuestro criterio profesional como arqueólogos-historiadores, los requisitos para un completo Plan de Acción.
