Diego López Alonso, catedrático del Departamento de Bilogía Aplicada de la Universidad de Almería, y Gabriel Acién, profesor del Depatamento de Ingeniería Química, han participado en un encuentro de expertos donde se han analizado los sistemas de producción masiva de microalgas y sus aplicaciones industriales. En esta cita celebrada este miércoles en el Centro Tecnolóxico do Mar, en Vigo, han participado científicos de las universidades de Vigo, Almería, Murcia y Málaga, así como investigadores del Instituto de Investigación para la Formación Agraria y Pesquera de Andalucía.
Este encuentro de científicos se ha desarrollado como parte del proyecto Biotecmar, que tiene como objetivo dar conocer procesos de valorización que sirvan para poder diversificar actividades vinculadas a la explotación y gestión sostenible de los recursos marinos.
Diego López participó con una conferencia sobre la modificación genética y dio lugar a cuatro informes sobre las aplicaciones industriales de estos organismos como la producción de biocombustibles y su papel en la acuicultura. Por su parte, Gabriel Acién presentó una ponencia en la que explicaba las posibilidades que presentan las microalgas para atrapar CO2.
La investigadora Cristina Sobrino, de la Universidad de Vigo, ha explicado que existen más de 10 millones de especies descritas de microalgas y que estos seres producen moléculas de interés biotecnológico e industrial. En este sentido, ha destacado que el desarrollo industrial en las últimas décadas hace que «se busque un aprovechamiento mayor» de las este recurso.
Por su parte, la doctora Stef van Bergeijk, del Ifapa, ha explicado que la producción mundial a gran escala se realiza en «sistemas abiertos» con un crecimiento «bajo condiciones variables», que se realizan fuera de Europa y con aplicaciones en el campo alimentario.
Paralelamente, en la Unión Europea y España existen empresas que utilizan sistemas cerrados con condiciones controladas y, por lo tanto, muy favorables para estos organismos, por lo que la producción de biomasa es mucho mayor. Así, ha señalado que algunas empresas en Holanda y Alemania producen especies destinadas a suplementos alimenticios, ingredientes de piensos para perros y caballos o fungicidas para campos de golf, entre otras aplicaciones.