El director de las Jornadas, Antonio Serrano, se reunió en la mañana del viernes con la delegada de Cultura, Yolanda Callejón; la diputada de Cultura, Caridad Herrerías; el concejal capitalino José Vélez; la edil de Cultura de Roquetas de Mar, Eloísa Cabrera; y el responsable de la Fundación Unicaja, Juan Pedro del Águila.
A lo largo de la reunión, todos los presentes han mostrado su intención en hacer lo posible para que esta cita cultural no desaparezca, y se ha logrado una solución de urgencia para salvar una cita cultural que se creía perdida hace tan sólo unas semanas.
En la cita de Roquetas de Mar se ha alcanzado el compromiso de apoyo de todas las instituciones a las Jornadas y su celebración en una nueva fecha, y se ha cerrado con un emplazamiento para un nuevo encuentro la semana que viene, en el que Antonio Serrano debe presentar un proyecto concreto para este año, después de que no haya prosperado la propuesta de Serrano para constituir una fundación.
El acuerdo total no ha sido posible. Por un lado, Antonio Serrano ha llegado a la reunión con una propuesta firme para crear una fundación con un patronato de forma que sea ésta la encargada de gestionar y organizar las jornadas. Sin embargo, los representantes públicos presentes en la reunión no han aceptado este punto. Según han puesto sobre la mesa, su intención es la de salvar a las jornadas y aunar esfuerzos para que este año se celebre una edición reducida.
Por este mismo motivo y para que las Jornadas de Teatro del Siglo de Oro, el segundo festival de teatro barroco más importante del país, no desaparezcan le han pedido a Antonio Serrano un proyecto concreto para una edición especial en 2010, que se podría celebrar en el mes de abril. Con un programa y un trabajo sobre la mesa, las instituciones participarían en función de sus posibilidades, pero sin bajar en demasía el nivel de este encuentro teatral.
La opción de crear una fundación y un patronato será algo que se estudie más adelante, ya que lo que actualmente importa es la celebración ‘in extremis’ de la que sería la vigésimo séptima edición de las Jornadas del Siglo de Oro. La reunión de esta mañana se ha cerrado con el compromiso de mantener un nuevo encuentro la semana que viene, en el que Antonio Serrano debe plantar sobre la mesa un proyecto claro para la edición 2010 de las Jornadas.
Y es que el tiempo corre en contra. A estas alturas resulta muy complicado elaborar un programa, ya que la mayoría de las compañías tienen muchas fechas cerradas y la disponibilidad es cada vez menor a medida que se acerca la fecha propuesta para la celebración del evento.
La prisa y el mayor esfuerzo hasta ahora es contar con un proyecto claro y comenzar a trabajar cuanto antes para que las Jornadas de 2010 queden lo más dignas posible.
