El ‘palo’ que los Presupuestos Generales del Estado (PGE) le han dado a la ciencia española ha generado malestar entre los investigadores. Un 15 por ciento menos en la partida destinada al Ministerio de Ciencia e Innovación, donde destaca la reducción del 26 por ciento en el presupuesto destinado al Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológcias (CIEMAT), ha provocado que muchos vean un freno a la innovación en un sector con un gran futuro por delante. El director del Centro de Investigación de la Energía Solar (CIESOL) de Almería, Manuel Pérez, ha sido muy tajante en este asunto y ha afirmado que «en tiempos de crisis hay que apoyar la innovación por el valor añadido que genera».
Al igual que en el resto de los sectores, la crisis económica también ha afectado a la ciencia y a la investigación. Sin embargo, muchas voces reclaman que este sector goce de cierta protección en los PGE porque de él depende el futuro de este país.
Como afirma Manuel Pérez, esta reducción del gasto «no debería afectar a sectores estratégicos para economía» como es el caso de las energías renovables, el campo en el que el CIESOL desarrolla su actividad principal.
Y es que, desde la Junta de Andalucía y el Gobierno central se ha señalado a la innovación y, concretamente, a las energías renovables como los motores de futuro de la nueva economía. Sin embargo extraña que los presupuestos para 2010 recojan un recorte tan significativo en este campo.
A pesar del dato negativo, el director del CIESOL defiende la fortaleza de las renovables en Andalucía y les atribuye una «fuerte incursión en los mercados internacionales. Son empresas fuertes, y están en un sector que genera un importante valor añadido, y que puede ayudar a llevar a cabo el cambio de modelo económico» que ayude al país a salir de la crisis.
Con estos PGE se interrumpe el crecimiento del sector científico registrado hasta 2008. Además, la estrategia de apoyo a estos proyectos de I+D+i se dirige a proyectos industriales financiados con créditos, en lugar de la subvención de la ciencia.
El presupuesto 2010 expresa una cuantía total de 1.497 millones de euros (en las partidas del capítulo 7, que cubre las subvenciones) frente a unos 1.800 millones de 2009. Con el Capítulo 7 se financian los proyectos de investigación del Plan Nacional, las becas y los contratos de jóvenes científicos no funcionarios.
