La Bodega de Alboloduy presentó cinco nuevos caldos, uno de ellos ecológico. Vinos que recogen todo el sabor de esta tierra y que llegarán al mercado con la intención de situar a Almería dentro del mapa de los productores de vino de calidad de este país.
Los presentes en la tarde de ayer en Diputación tuvieron ocasión de degustar las nuevas variedades de la Bodega Alboloduy, que van desde un vino joven, otro dulce, uno ecológico, y otros dos tintos más convencionales, pero que gozan de toda la calidad que sus hermanos de bodega.
Estos caldos son fruto del esfuerzo de Francisco Calvache y su equipo en la bodega, que han sabido reconvertirse en viticultores de calidad, y ya consideran más que superado su pasado como parraleros.
Esta empresa almeriense tiene el honor de haber sido la primera de la provincia en conseguir, en 2006, una medalla en Madrid, con su vino Taracín Tinto Barrica 2005. El primer galardón al que luego acompañaron otros en Torremolinos, Sevilla, Argentina, Alemania y los de París en la «Vinalies Internationales», un concurso de enólogos franceses de los más prestigiosos del mundo.