La defensa de la energía nuclear, una apuesta decidida por la innovación, así como un pacto que transforme la estructura de negociación colectiva y una potenciación de las políticas activas de empleo son varias de las tesis principales que defiende el número 16 de la Colección Mediterráneo Económico que edita Cajamar, y que en esta ocasión ha estado coordinada por el prestigioso economista y Premio Príncipe de Asturias Juan Velarde. Este número lleva por títula ‘El futuro de la economía española’ y aborda el sistema español desde todos los puntos de vista posibles y con la ayuda de expertos de reconocido prestigio.
Una vez más, Cajamar acertó a la hora de elegir el tema para el último número de Mediterráneo Económico. El plena crisis y cuando parece que los indicadores denotan una situación ‘menos mala’ que hace algunos meses, más de una veintena de expertos de reconocido prestigio analizan el sistema económico español, y se centran en los puntos claves para plantear alternativas para que la economía española remonte vuelo lo antes posible.
Entre los asuntos que abordan los veinte artículos que componen ‘El futuro de la economía española’, destacan la agricultura, convertida ya en la industria agroalimentaria y evolucionada de tal forma que nada tiene que ver con la que se hacía hace unas pocas décadas. La energía, que Juan Velarde señala como la pieza clave para que España pueda avanzar y que, para ello, debe ser abundante, de calidad y no controlada por terceros países; en palabras de Velarde, que despreció a los defensores de las renovables, «o se trepa por la cuerda que ofrece la energía nuclear o nunca saldremos de este oscuro callejón».
Este nuevo volumen de la colección de Cajamar también aborda el sistema industrial español, del que destaca que la alta tecnología ha escapado de la industria manufacturera, y se define al país como «moderadamente innovador», al nivel de Portugal y superado por países como la República Checa o Estonia.
El mismo estudio también aborda asuntos tan importantes para la economía española como el sistema laboral, para el que pide una reforma; la población española, el la que destaca el importante aumento de personas mayores de 65 años; la internacionalización de la economía, que ha disminuido por la entrada del euro y que debe repuntar con la mejora de la competitividad; el sector público; la cuestión regional; y la empresa del futuro.
Previamente a la intervención del profesor Velarde, Antonio Torrero, uno de los autores participantes en el estudio, habló de la crisis financiera y destacó la imposibilidad de que los economistas sean capaces de predecir estas crisis. Torrero entró en el origen de la crisis financiera, con la concesión de créditos de alto riesgo para la adquisición de viviendas en Estados Unidos a personas con muchas dificultades para asumir esos pagos, y la posterior conversión de la vivienda en un activo financiero, en vez de un bien fijo como hasta entonces había sido.
Torrero animó a mirar de nuevo al pasado para aprender de crisis anteriores y aseguró que la estabilidad financiera no es la situación normal del sistema, que por sí mismo genera inestabilidad.