- Francisco Andújar y Lorenzo Cara ofrecen las dos primeras de las nueve conferencias y dos itinerarios que se desarrollarán hasta el próximo 10 de diciembre
- El obispo Villalán y sus desafíos para financiar la construcción de la Catedral y los sistemas de defensa de la ciudad en tiempos convulsos protagonizaron los primeros análisis
La Asociación Amigos de la Alcazaba inicio este lunes un nuevo ciclo de difusión, disfrute y también defensa (porque conocer algo es la mejor manera de aprender a defenderlo) del patrimonio almeriense, en esta ocasión poniendo el foco en el V Centenario de la construcción de la Catedral de Almería, bajo el nombre ‘La Almería del obispo Villalán’. El salón de actos de la UNED recibió lo que en términos musicales se definiría como un ‘sold out’, un lleno absoluto del aforo para las dos primeras de las nueve conferencias y dos itinerarios incluidos en un programa que se extenderá las próximas semanas hasta el próximo 10 de diciembre.
Tras la bienvenida del directivo Francisco Verdegay y de la subdirectora de la UNED en Almería, María del Carmen Pérez Fuentes, intervinieron los dos primeros ponentes de este amplio ciclo: el historiador Francisco Andújar Castillo, que ofreció la conferencia ‘El obispo Villalán entre moriscos y señores, con la catedral de fondo’, y el arqueólogo Lorenzo Cara Barrionuevo, con ‘Los Muros del Tiempo. Transformaciones de Almería en el Cruce de Civilizaciones’.
Con una capacidad de síntesis magistral, Francisco Andújar realizó una brillante exposición que sirvió para realizar un profundo primer acercamiento a la figura de fray Diego Fernández de Villalán, el contexto con el que afrontó el obispado de Almería, los retos, los desafíos y los objetivos principales de una tarea que también le granjeó algunos enemigos a cuenta de su constante trabajo para conseguir la financiación necesaria para la construcción de la Catedral, cuya primera piedra se puso el 4 de octubre de 1524, día de su patrón San Francisco, apenas dos años después del devastador terremoto de 1522.
“Villalán estaba al frente de la diócesis más pobre del Reino de Granada, compuesto por los obispados de Granada, Guadix, Málaga y Almería, que apenas representaba un 9% de los ingresos de los 4 obispados. ¿Cómo pudo entonces financiar una obra tan importante como la Catedral?”, se preguntó Francisco Andújar. Siguiendo el método científico, enumeró los numerosos conflictos que lidiar, entre ellos con personajes tan poderosos como el Marqués de los Vélez, o el arzobispo de Granada, Gaspar De Avalos, que pidió su cese, pasando por el obispado de Cartagena, que arrebató pueblos del norte de la provincia, el cabildo, los señoríos que se negaban a pagar diezmos, un sacerdocio corrupto o la escasa población cristiana de la diócesis almeriense, que se cifraba en 25 familias cristianas viejas frente a las casi 1.400 las moriscas, la mayoría falsos conversos.
Con todo en contra, Villalán superó todos los retos. Consiguió acuerdos con señores, especialmente con el Marqués de los Vélez, que se hizo también con todo el Almanzora; con los moriscos, que tras la inspección ordenada por Carlos V apostaron por pagar una contraprestación económica para que todo siguiera igual y evitar así que se fueran a otras provincias; y con Juan de Ortega, sobrino del anterior obispo, acusado de malversación.
Con la llegada de más de 13.000 ducados pudo conseguir sacar adelante una construcción, aunque también con la sombra de haber colocado a su séquito familiar y las quejas de sus ‘reconocidos’ enemigos que alertaban a las altas esferas: “¿Está destinando el obispo recursos a la Catedral en perjuicio de la construcción de otras iglesias de los pueblos de la diócesis?”.
Almería, aprendiendo a defenderse
Por su parte, la conferencia de Lorenzo Cara versó sobre la situación defensiva y los distintos sistemas defensivos que va adquiriendo la ciudad en unos tiempos convulsos en torno al Mediterráneo Occidental. En palabras del arqueólogo, “más allá de conceptos anacrónicos de ‘reconquista’ o ‘choque de civilizaciones’, estudios recientes de los presidios norteafricanos como Orán nos hacen imaginar una frontera por la que circulan personas e información donde resuenan los ecos de lo que ocurre en todo el Mediterráneo, convertido en un campo de batalla por el control marítimo”.
De esta forma, los Reyes Católicos, conscientes del peligro que suponían los ataques de los corsarios musulmanes al litoral, organizaron un sistema de vigilancia en las torres costeras para proteger a los habitantes. Además, “el impacto de la pólvora y la artillería sobre las estructuras medievales impulsó la necesidad de fortificaciones más robustas, diseñadas para absorber y desviar el impacto de los proyectiles”, añadió Cara.
A lo largo de su exposición, Lorenzo Cara hizo especial hincapié en los sistemas defensivos adoptados por la ciudad, en sus murallas, en la construcción de del castillo de la Alcazaba y de la catedral-fortaleza de Villalán. También abordó las grandes fases de planificación defensiva, sus planteamientos y necesidades y el papel de los distintos agentes sociales en su construcción y gestión, detallando en la parte final una suerte de inventario o recuento de obras, antes y después del terremoto de 1522. Desde la adaptación de murallas antiguas, baluartes, pasando por torres, torrefuertes, torres vigía, otras adosadas a iglesias (especialmente significativa la de la iglesia Santo Ángel Custudio de Darrical, que tenía un puente levadizo que la unía). Un impresionante sistema defensivo.
Es por eso que la Catedral también se concibiera desde un punto de vista defensivo, destacando el reducto que situaba frente a la portada renacentista, que estuvo protegida “por una torre de potencial constructivo importante”, concluyó.
Próxima semana
La próxima conferencia del ciclo será el próximo martes, 19 de noviembre, a las 18.30 horas, de nuevo en la UNED. En este caso con Rosario Torres Fernández y ‘El esplendor artístico en la ciudad de Almería: la construcción y dotación de la Catedral’. La propia Rosario Torres encabezará el itinerario previsto para el sábado, 23 de noviembre, a partir de las 10.00 horas en la Catedral. Las inscripciones a la visita se realizarán el día de la conferencia.
