erca de mil personas asistieron al primer espectáculo musical en la Plaza de Toros, adecuada hasta el mínimo detalle para garantizar la máxima seguridad
La Plaza de Toros acogió anoche el primero de los conciertos programados en el Verano Seguro de Roquetas de Mar que supuso un homenaje a los abuelos de la mano de Strad, el violinista rebelde. Un auténtico espectáculo musical y visual con el que se pudo comprobar la gran organización que se ha llevado a cabo para poder disfrutar de la cultura con las máximas condiciones de seguridad. El concejal de Educación, Cultura y Juventud, Juanjo Salvador, así lo atestiguó y quiso “agradecer todo el trabajo que está detrás de este espectáculo, especialmente de los técnicos del Área de Cultura, y también de Protección Civil y Cruz Roja y de todos los implicados”.
Alrededor de mil personas se dieron cita en esta primera cita y disfrutaron de este concierto desde el ruedo, donde se fueron ubicando las sillas guardando una distancia de seguridad entre grupos de convivencia. Se logró también una entrada escalonada, con medición de temperatura y disposición de gel a los asistentes.
“Hemos vivido con mucha ilusión este primer espectáculo y animamos a todos a disfrutar de todo el ciclo de conciertos que tienen además un componente solidario doble, ya que las entradas son benéficas y también la venta de agua en el interior de la plaza se ha concedido a las asociaciones a las que van destinado el importe de las entradas”, explica el concejal. Por otro lado, Juanjo Salvador destaca “el apoyo a los grupos roqueteros que se ha incluido en este ciclo, como los teloneros de los tres conciertos juveniles programados”.
De hecho, anoche, abrió la velada el roquetero JJ Fuentes y su banda, en el mismo día en el que estrenaba su nuevo videoclip junto a Cifu, voz de Celtas Cortos, cuyo tema cerró su actuación.
Poco después, Jorge Guillén, el violinista rebelde, hacía su aparición entre las gradas de la Plaza de Toros, dejando claro que su espectáculo no iba a ser un espectáculo al uso. Desde el rock de Queen hasta la copla de Rocío Jurado, el violín de Strad pasó de registro en registro, se paseó por los pasillos del patio de butacas y sorprendió al público familiar.
Un espectáculo en el que presentaba su último trabajo, Mundos Contrapuestos, y en el que realizó un homenaje a los abuelos. De hecho, Guillén contó a los presentes su propia historia personal y el apoyo que ha recibido en su carrera musical por parte de sus padres y abuelos y especialmente de su abuelo, fallecido por coronavirus en marzo de 2020. Abrió su alma con anécdotas y recuerdos que salpicaban sus canciones, e incluso permitió a los presentes disfrutar de la grabación en voz de uno de los poemas escrito y leído por su abuela, en uno de los temas que jugaron con esferas de luces sobre el escenario.
