La delegada territorial de Fomento, Infraestructuras, Ordenación del Territorio, Cultura y Patrimonio Histórico, Eloísa Cabrera, ha visitado esta mañana los trabajos de restauración de la Muralla Norte del Primer Recinto de la Alcazaba de Almería, que comenzaron el día 17 del pasado mes de febrero y que cuentan con un presupuesto de 738.465 euros, financiados a través de los fondos Feder.
La duración de la obra está prevista inicialmente en 15 meses y tiene lugar sobre casi 200 metros de muralla de la Alcazaba, en concreto, “en un tramo que apenas ha sido intervenido antes y donde, en consecuencia, con mayor rigor se pueden identificar las estructuras originales de la fortaleza”, ha señalado Cabrera, que ha incidido en que “los criterios que rigen la intervención tratan de mantener esa imagen primigenia de la Alcazaba, restaurando las fábricas de forma rigurosa tras su estudio arqueológico y eliminando aquellos añadidos o materiales recientes que desvirtúan esa imagen del monumento y que pueden comprometer su propia conservación”.
Las obras de rehabilitación de la Muralla Norte del Primer Recinto de la Alcazaba abarcan cuatro lienzos murarios y cinco torres, entre el Baluarte del Saliente y la torre del Muro de la Vela. La delegada ha detallado que los trabajos han comenzado por la zona más cercana al Muro de la Vela, en un tramo que representa el 35% de la zona a intervenir. En él se están desmontando forros ejecutados en el siglo XX con mortero de cemento, siendo sustituidos por nuevas mamposterías, más acordes a las originales por su aparejo y por el empleo de mortero de cal.
Por otra parte, se está actuando sobre los merlones y pretiles que rematan la muralla, estudiando su evolución y características principales. En esa zona se consolidan las estructuras y se eliminan revestimientos recientes realizados con cemento, siendo sustituidos por nuevos enlucidos de cal, parecidos en textura y color a los originales conservados. Estos destacan por su color blanquecino, que se está recuperando tras la eliminación de las costras de suciedad.
En esta línea, Eloísa Cabrera ha destacado que “la nueva imagen que se obtendrá de las murallas de la Alcazaba será novedosa y contrastará con el color pardo empleado en las restauraciones del siglo pasado, pero será fruto, en cualquier caso, del estudio de los restos originales”.
La delegada – que ha estado acompañada por el arquitecto director de obra del proyecto que se está ejecutando, Pedro Gurriarán y la directora del Conjunto Monumental, Gema Embí – ha destacado el “compromiso de la Junta de Andalucía con la Alcazaba de Almería con actuaciones como ésta en las que se interviene para cuidar la imagen original de la fortificación, eliminar elementos inadecuados utilizados en anteriores intervenciones y proteger y conservar vestigios arqueológicos”.
Para Cabrera es importante que los ciudadanos “vayan conociendo de primera mano los avances que se van produciendo en esta obra, que llevaba más de diez años paralizada, que ya es una realidad y que manifiesta el compromiso real del nuevo Gobierno de Juanma Moreno con la Alcazaba de Almería”. También se ha referido a otras tres actuaciones de futuro inmediato como son el segundo tramo de la Muralla Norte, la Muralla Sur y la Muralla del Cerro de San Cristóbal y otras obras de mantenimiento que se están llevando a cabo.
Pedro Gurriarán, arquitecto director de obra del proyecto que se está ejecutando, se ha mostrado satisfecho por el curso que están llevando los trabajos y ha señalado que el ritmo de las actuaciones en incluso superior al de las previsiones “cumpliendo los objetivos que pretendemos con esta iintervención”.
Gurriarán ha destacado “la recuperación de los colores originales de la Alcazaba”, señalando que hay enlucidos y revestimientos que son de época medieval “que al limpiarlos y restaurarlos nos está permitiendo observar que la Alcazaba de Almería, al contrario que vemos en otros paños del monumento, tenía una muralla blanquecina, muy lejos del color tierra que estamos acostumbrados a ver, por ejemplo, en su frente sur”.