Bajo la expresividad de Cristina Bayón, la técnica impecable de Sara Águeda con el arpa de dos cuerdas y la emoción del público, el Castillo de Santa Ana viajó al siglo de Oro. Un concierto dedicado a Manuela Escamilla, actriz- cantante de la época que heredó la compañía de su padre y se convirtió en un referente.
Sesenta minutos en los que no faltó detalle, donde el silencio y la mirada atónita del público hizo eco. Las cuerdas del arpa vibraban al ritmo del hilo de voz de la soprano, que a su vez cantaban las fases de la vida de Escamilla. Comenzaron con la etapa de su niñez, pasando por la muerte de su padre, su compromiso, su visión ante el amor y de la vida.
En el ecuador del espectáculo musical, la arpista, Sara Águeda, sorprendió a los asistentes tocando el arpa de dos cuerdas de forma improvisada con ritmos latinos. “Esta pieza que voy a tocar es para vosotros, inédita”, resaltó la artista. A lo que añadió “este instrumento data de 1555, tiene dos cuerdas y van entrecruzadas. Se trata de un Ibérico y, sobre todo, se usaba en los siglos XVI Y XVII, aunque en España hasta principios del siglo XVII se estuvo usando. Era un instrumento tan importante, casi, como la guitarra”.
“Pasado el ecuador del festival, nos hemos transportado al siglo de Oro y de nuevo un concierto relacionado con la mujer, con su importancia en la sociedad. Estamos muy contentos y orgullosos porque la respuesta del público está siendo perfecta. Esto nos anima a seguir trabajando como hasta ahora y a empezar a pensar en el décimo aniversario del festival MareMusicum. Invito a todos lo roqueteros y visitantes a que pasen por el Castillo el resto de días a escuchar tan buena música”, expresó el concejal de Cultura, Educación y Juventud del Ayuntamiento de Roquetas de Mar, Juanjo Salvador.
La programación continúa y para esta tarde- noche, la joven orquesta de la Escuela de Música tocarán a Bach y Vivaldi en la Parroquía Nuestra Señora del Carmen, en Aguadulce, a las 19:00 horas. Más tarde, a las 21:30, Emilio Villalba y Sara Marina, volarán a la música, al arte y a los instrumentos medievales. Estos artistas realizarán un viaje sonoro a través de las máquinas inventadas, reflejo de pura sensibilidad y talento para crear belleza y estimular los sentidos.
