La sala Miralles de exposiciones temporales del Museo de Almería acoge, del 12 de mayo al 26 de junio, la muestra ‘Desaparecidos’, de Carmen Cantabella. Se trata de 32 pinturas y 24 esculturas de esta artista murciana que, a través de sus obras, transmite una concepción irónica y rebelde de la historia y de la condición humana.
La exposición, con un marcado discurso antibelicista, está relacionada con las distintas actividades que se celebran en el Museo de Almería en recuerdo del ochenta aniversario del comienzo de la Guerra Civil.
Javier Cerezo, galerista y comisario de la muestra, destaca que la obra de Cantabella ‘tiene vocación de crónica pero rechaza la narración de grandes acontecimientos sociales y políticos a favor de pequeños sucesos. Su proyecto es documentar y sacar a la luz las deficiencias de la sociedad de nuestra época y la conclusión a la que llega es que vivimos cotidianamente una existencia amenazada’.
‘Cantabella muestra que los ciudadanos somos entes frágiles y, como personas, somos extremadamente vulnerables’, afirma Cerezo, que describe sus pinturas como ‘curiosidades fotográficas, casi como instantáneas, en las que escenas subversivas descubren la farsa de la historiografía oficial’. Son frecuentes las composiciones con personajes infantiles en las que se ensalza la exhuberancia creativa de los niños porque ‘sirven como metáfora para representar a las personas que experimentan el mundo por primera vez’.
En cuanto a las esculturas, abundan los pequeños astros y asteroides, símbolo del cambio de escala que han adquirido los desafíos e interrogantes a los que nos enfrentamos que deben contemplarse desde una dimensión planetaria.
