La Junta de Gobierno Local del Ayuntamiento de Roquetas ha aprobado la adjudicación del proyecto «Actuaciones en la estructura viaria principal para la mejora de la Seguridad Vial» por importe de 175.000 euros. Es por ello que la teniente alcalde y concejal de Gestión de la Ciudad, área que integra Movilidad, ha querido presentar públicamente el plan y responder a las distintas inquietudes que puede generar «un tema sensible, prioritario para el equipo de Gobierno, como es la seguridad de los viandantes en los pasos de peatones, que desgraciadamente se está manipulando en el municipio, frente al trabajo riguroso que está desarrollando el Ayuntamiento».
Cabrera ha estado acompañada por el intendente jefe de la Policía Local, Miguel Ángel López, el jefe de la Unidad de Tráfico, Antonio Villanueva, y el responsable de las campañas de educación vial, Ángel Hernández, así como por el ingeniero redactor del proyecto, Juan José Alonso, y el técnico de Movilidad del Ayuntamiento, Gabriel Sánchez.
La teniente alcalde ha aclarado que el presente plan «contempla tan solo una primera fase» que se irá ampliando en sucesivas actuaciones «sobre todo cuando esté en marcha la variante de Roquetas, que es la verdadera medida pacificadora del tráfico en las arterias principales del municipio, actualmente único acceso a los distintos núcleos de población».
Exhaustivo análisis
Tal como ha detallado la edil, el proyecto se ha desarrollado «en base al Plan de Movilidad que actualiza la información obsoleta y escasa del PMUS de 2007, a los informes de la Policía Local y la DGT sobre siniestralidad y a los conteos realizados sobre flujos de peatones y vehículos en los 110 pasos existentes». Unos estudios que permiten asegurar que «las características de la vía y la presencia de obstáculos visuales no son, como se ha extendido, causa principal de los sucesos», por lo que, ha afirmado, «era necesario elaborar un plan integral».
En esta idea ha incidido Gabriel Sánchez, quien ha subrayado que las medidas a implementar «son resultado de un análisis exhaustivo de la composición, ubicación, estado y necesidad de los elementos de ordenación del tráfico: señalización, ajardinamiento, iluminación, etc., de la red viaria, para determinar las posibles debilidades y establecer el grado de actuación». En este sentido, ha señalado, «se han tenido en cuenta todas las posibles variables que intervienen en la circulación de vehículos y el tránsito de peatones, en cuanto a las vías y su entorno se refiere», ya que, ha explicado, los siniestros «tienen tres posibles causas: factor humano, del vehículo o de la vía, y este proyecto actúa sólo sobre la vía».
Eliminación de dos pasos
Por su parte, el redactor del proyecto, Juan José Alonso, ha explicado que las medidas incluyen «actuaciones para moderar la velocidad del tráfico, mejorar la señalización horizontal y vertical, mejorar la iluminación y recolocar puntos de luz en pasos de peatones, eliminación de efectos pantalla mejorando la visibilidad en los pasos de peatones, supresión de pasos peatones para canalizar los itinerarios peatonales y semaforización de pasos de peatones» además de la «adecuación de los pasos a la normativa sobre accesibilidad».
En concreto, Alonso ha enumerado «la colocación de uñas de gato, señales luminosas y semáforos con pulsador en cuatro pasos de peatones de la Avenida Carlos III». Por su parte, «teniendo en cuenta los informes de la Policía Local y la cercanía existente entre pasos de peatones, se ha decidido eliminar dos de ellos, el número 19 de la Avenida de Alicún, que coincide con la incorporación de una tercera vía a la altura del Gran Plaza, y el número 21 del mismo tramo, a la altura de la gasolinera».
El especialista ha querido subrayar igualmente que «todas las medidas se encuentran dentro de la normativa, contempladas en las distintas instrucciones del Ministerio, muy estudiadas y responden a criterios técnicos» y ha afirmado que «también se han estudiado otras posibilidades que no se consideran oportunas como la colocación de pasos en zigzag, ya que no existe anchura suficiente en la mediana y sería contraproducente».
Lo mismo ocurre con la eliminación de posibles obstáculos visuales. «Para el cálculo de la distancia necesaria para una correcta visibilidad se ha seguido escrupulosamente una fórmula marcada por ley», ha comentado, para añadir que «la eliminación de toda la vegetación, iluminación de la mediana, etc., como se ha propuesto en otras ocasiones, da como resultado una mayor velocidad de tránsito por la vía, al transmitir una falsa sensación de seguridad para reaccionar ante peatones e imprevistos, lo que puede ocasionar mayores problemas y atropellos más graves al incrementarse la velocidad».
No existen puntos negros
El intendente jefe de la Policía Local, Miguel Ángel López, ha expuesto en la presentación algunas conclusiones del Informe sobre siniestralidad en el que se ha basado el proyecto «que incluye todos los datos de todos los siniestros ocurridos desde 2012 en estas vías y todas sus causas, que son muy variadas, gran parte de ellos ajenos a las circunstancias de la vía».
López ha querido dejar claro «que en el término municipal de Roquetas de Mar no existen puntos negros, ya que para que así se consideren debe de haberse producido tres o más siniestros graves en un año en un margen de 100 metros de distancia, algo que no se produce en Roquetas».
En este sentido, la teniente alcalde ha pedido «cautela» cuando se trata sobre este tema, «ya que en política no todo vale». Cabrera ha anunciado por último «la celebración de campañas de concienciación y sensibilización dirigidas a colectivos concretos a partir del próximo mes, con mensajes como el peligro de las distracciones para los peatones».
«Estoy convencida de que la implicación de todos los agentes de la sociedad, y quiero agradecer en concreto a la Policía Local y al Área de Movilidad su trabajo, logrará que la mejora de la seguridad vial sea una realidad», ha concluido.
