Antonio López, como en casa en el Museo Casa Ibáñez

Antonio López, como en casa en el Museo Casa Ibáñez

Compartir

El pintor Antonio López volvió a impartir una nueva edición del Curso de Realismo y Figuración en el Museo Casa Ibáñez de Olula del Río, que finalizó con la presentación de un libro en el que se recogen las obras del pintor manchego que se custodian en el centro de Olula, y que fue presentado este viernes.

Ante más de doscientas personas, en la tarde noche del pasado viernes, 16 de mayo, se clausuraba oficialmente el III Curso de Realismo y Figuración que, desde el 12 de mayo, han impartido Antonio López (Tomelloso, 1936) y Andrés García Ibáñez (Olula del Río, 1971) en el Museo Casa Ibáñez de Olula del Río (Almería). Un acto con el que los responsables de la institución cultural hicieron coincidir, en homenaje al pintor manchego, el de presentación de la última publicación de la Fundación Museo Casa Ibáñez: “Antonio López. Obras del Museo Casa Ibáñez”. Una extensa monografía coeditada con el Instituto de Estudios Almerienses de la Diputación de Almería.

Los actos programados se iniciaban con las palabras de bienvenida a todos los asistentes del director del Museo y Coordinador de los Cursos de Realismo y Figuración, Juan Manuel Martín Robles. Éste, tras felicitar a todos los participantes en el curso por el trabajo realizado durante los cinco días de duración del mismo y hacer un balance “sumamente positivo” del desarrollo de esta tercera edición, pasó la palabra al alcalde de Olula del Río, Antonio Martínez Pascual.

Pascual, tras los correspondientes agradecimientos a todas las personas “que han hecho posible que, gracias al Curso de Realismo y Figuración, Olula haya sido durante cinco días un referente internacional para el mundo del Arte”, paso a darle a Antonio López una grata sorpresa para éste inesperada. Y es que, tras la lectura de la correspondiente acta del Pleno Municipal celebrado en julio de 2013, le comunicaba oficialmente a Antonio López: su nombramiento como hijo adoptivo de Olula del Río, la decisión del Pleno de cambiar el nombre de la Avenida “Carretera Alta” por el de Avenida “del pintor Antonio López”, y la imposición al maestro de Tomelloso del Escudo de Oro del pueblo de Olula del Río.

Antonio López recibía emocionado tales honores y, tras la imposición del Escudo de Oro, se fundía en un entrañable abrazo con Pascual, a quien le agradecería “todo lo que me dais”.

El acto de clausura continuaría con las intervenciones de Santiago Alfonso, en nombre de la empresa Cosentino, y Antonio Ramón Salas, presidente de la Mancomunidad de Municipios del Valle del Almanzora. Ambos, tras agradecer a Antonio López su compromiso con el Museo Casa Ibáñez, con el Almanzora y con Almería, destacarían la importancia y consolidación del Curso de Realismo y Figuración y cómo éste tiene una repercusión muy favorable en la imagen de la comarca almanzorí y de la provincia de Almería. También aprovecharía Salas su intervención para solicitar la implicación de la administración autonómica en el mantenimiento del Museo Casa Ibáñez y recordarle a todos los asistentes cómo la comisión de Cultura del Parlamento Andaluz aprobó, por unanimidad de todos los partidos, una Proposición No de Ley en la que se ponían las bases para colaborar desde la Junta de Andalucía con el Museo y cómo “hasta el día de hoy, ni siquiera han tomado contacto con el Patronato que gestiona la institución”.

Como cierre del acto de clausura se procedió a la entrega de los diplomas acreditativos a los 36 participantes y se hicieron públicos los nombres de los artistas cuyos ejercicios habían sido seleccionados, por su calidad, por Antonio López y Andrés García Ibáñez: Akihito Asano, Enrique González Reche, Inocencia Isabel Sanz, José Fernando Mellado Pardo, Javier Parra García, Ricardo Pedraza Pérez, Miguel Pujante Hernández y Luis Paltré Jiménez. Artista este último cuya obra ha pasado a formar parte, por decisión de López e Ibáñez, de la colección del Museo Casa Ibáñez.

Inmediatamente después de la clausura del III Curso de Realismo y Figuración comenzaba la presentación del libro Antonio López. Obras del Museo Casa Ibáñez. Una monografía coeditada por la Fundación Museo Casa Ibáñez y el Instituto de Estudios Almerienses (IEA) de la Diputación, con la colaboración de la empresa Cosentino.

Un libro definido por su autor, Juan Manuel Martín Robles, como un “sueño hecho realidad”, y del cual contaba su génesis a los asistentes: “La idea de este libro me la dio el propio Antonio López durante los días que, con motivo de la inauguración del Museo Ibáñez de Melilla en septiembre de 2012, pasamos en la Ciudad Autónoma. Comentaba Antonio que lo que más le había impresionado del catálogo de la exposición de Hopper organizada por el Museo Thyssen era el apartado que recogía, año a año, un estudio exhaustivo del hombre y el artista. Y ahí nació la idea de dedicarle, como complemento al estudio de las ocho obras que en el Museo Casa Ibáñez conservamos del maestro, un estudio biográfico año a año destacando tanto su faceta profesional, como la personal”. Tras esta explicación, el autor desgranó brevemente los contenidos del libro y agradeció todas las facilidades que tanto Antonio López como su hija, María López Moreno, le habían dado a la hora de realizar este trabajo.

Tras Martín Robles era Andrés García Ibáñez quien, como presidente de la Fundación Museo Casa Ibáñez y conocedor de la obra de López, señalaba la importancia de esta publicación: “una edición modesta, pero que viene a cubrir una parcela aún no estudiada rigurosamente sobre Antonio López. Ofreciéndole al lector un exhaustivo recorrido por la biografía del artista, lo que seguramente convertirá esta publicación en un referente”.

Por último cerraba el acto Antonio López. Comenzaba el maestro manchego, tras agradecer a todos los participantes en el III Curso de Realismo y Figuración su compromiso y su trabajo, dando las gracias a Martín Robles por el “concienzudo y exhaustivo trabajo realizado en este estudio”, destacando la intensa labor de recopilación de datos y apuntando que “es un libro que me gusta, que me acompaña en mi día a día. Deberían hacerse más libros así, con un tamaño fácil de manejar y que nos permitan conocer en profundidad la vida de los artistas que tanto nos interesan”.

No hay comentarios

Deja un comentario