Calar Alto podría tener un director designado por el socio alemán

Calar Alto podría tener un director designado por el socio alemán

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Telescopio de 3,5 metros.

El observatorio hispano-alemán de Calar Alto podría tener un director germano, que designaría el instituto Max Planck. Actualmente, el centro se encuentra sin dirección, después de que dimitiera José María Quintana, debido a los recortes presupuestarios a los que ha sido sometido el centro.

La situación en el observatorio almeriense no deja de enrarecerse, según ha podido saber este medio. Actualmente, el centro dependiente del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y la sociedad alemana Max Planck se encuentra sin director, tras la dimisión de José María Quintana.

A pesar de que la normativa obliga a Quintana a permanecer en el cargo en funciones tres meses, éste no puede atender sus responsabilidades, ya que la tensión de las negociaciones mantenidas en torno al presupuesto del centro le han provocado problemas de ansiedad e insomnio y actualmente se encuentra de baja médica.

Esta situación se traduce en cierta descoordinación en el observatorio almeriense, que ya lleva varios meses sin aprovechar todas las noches de observación, debido al recorte presupuestario;  y también se ha visto a dejar de lado la labor de divulgación científica que realizaba.

Según han informado trabajadores del observatorio, es más que probable que la dirección del centro pase a manos alemanas, algo que no ha gustado en la plantilla.

Los trabajadores del observatorio astronómico de Calar Alto se han movilizado contra el recorte en el presupuesto, que ha dejado al centro trabajando bajo mínimos, y protagonizaron una huelga de una semana entre el 27 de marzo y el 2 de abril.

Los recortes en el presupuesto del Observatorio Astronómico de Calar Alto han provocado que el centro no pueda atender los encargos de aluminizado de espejos para clientes externos, tal y como hacía tradicionalmente, y que suponían una importante fuente de ingresos para la institución.

Actulamente, el observatorio almeriense tiene un encargo de la empresa belga AMOS para la aluminización de un telescopio que se va a instalar en el obserbatorio aragonés de Jabalambre. Sin embargo, este trabajo tendrá que realizase en los observatorios de Canarias o Rusia.

Del mismo modo, los espejos del observatorio de Sierra Nevada, que habitualmente se reparan en Almería, tendrán que ser enviados cada cierto tiempo al extranjero, para su aluminizado periódico si persiste esta situación, a la que se ha llegado por el recorte presupuestario impuesto por el Centro Superior de Investigaciones Científicas y la sociedad alemana Max Planck, actuales propietarios del centro.

Situación crítica

Calar Alto camina hacia el desastre. Los sucesivos recortes en su pruesupuesto, que lo han dejado solo con 1,6 millones de euros, hacen prácticamente imposible la continuidad de la actividad científica en el observatorio almeriense, uno de los más importantes del mundo, según han denunciado trabajadores del Instituto Andaluz de Astrofísica (IAA).

En cuestión de dos años, Calar Alto ha pasado de contrar con 3,7 millones a los 1,6 actuales, un presupuesto con el que resulta prácticamente imposible la viabilidad del centro y que ha motivado la dimisión de su director, José María Quintana.

Del mismo modo, están en peligro los proyectos de gran envergadura que se están desarrollando en el centro almeriense, en los que ya se han invertido nueve millones de euros, que se perderían si llegan a paralizarse. Los instrumentos de última generación como la cámara PANIC y los espectógrafos de alta resolución CARMENES y CAFE, que iban a mejorar la competitividad científica del observatorio, podrían paralizarse.

Recortes sucesivos

Tras la modificación del acuerdo entre el CSIC y la SMP en abril de 2013, que abrió las puertas a un importante recorte presupuestario, tanto la dirección del observatorio como los comités científico y tecnológico de CAHA se centraron en planificar el presupuesto más ajustado posible.

Este esfuerzo se tradujo en una propuesta de financiación de 2,7 millones de euros anuales, muy por debajo de los 3,7 y 3,8 millones de euros que CAHA obtuvo en 2011 y 2012. Dicha propuesta se vio minorada por el comité ejecutivo (formado por representantes del CSIC y SMP) hasta los 2,2 millones de euros.

Sin embargo, de esos 2,2 millones, seiscientos mil euros proceden de remanentes del observatorio de años anteriores. Así, la dotación para CAHA se reduciría a 1,6 millones de euros, una cantidad que imposibilita la viabilidad del centro.

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