El baile flamenco, según las pinturas de Zaafra

El baile flamenco, según las pinturas de Zaafra

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El pintor granadino David González ‘Zaafra’ inaugura este viernes, a las 20 horas en la sala Juan Ibáñez de la Plaza de Toros de Roquetas la exposición ‘De Carmen Amaya a Mariquilla’. Zaafra comenzó a dibujar y pintar a Carmen Amaya desde niño prácticamente, desde 1963 en que tuvo la ocasión de encontrarse con un artículo de Tico Medina en la revista La Actualidad Española.

En el artículo salían unas magníficas fotos de ella bailando que le sirvieron de inspiración. “Este artículo aún lo conservo y era una despedida de Carmen en sus últimos días de su cruel enfermedad. De ella he realizado dos libros ‘Vida y Arte de Carmen Amaya’ y ‘Carmen Amaya de Leyenda’. A lo largo de 45 años pintándola he realizado más de cien dibujos y pinturas de ella y bastantes exposiciones por todo el mundo”.

Por su parte, “de Mariquilla, comencé a pintarla siendo muy jovencito cuando la vi bailar por primera vez en la Sala de Fiestas del France en 1968. Ella aún lo recuerda. Desde aquel día quedaron grabados en mi mente sus movimientos de brazos sus explosivos zapateados y su energía arrolladora. De ella he realizado dos libros: ‘Mariquilla Arte y Pasion Flamenca’ y ‘Diez Perlas para una Reina’. También he pintado y dibujado más de cien pinturas y dibujos inspirados en su arte así como infinidad de exposiciones a lo largo de muchos años”, comenta David Zaafra.

David González “Zaafra”, nacido en Granada en el año 1948, con una formación bastante alejada de todo academicismo, muestra a lo largo de su trayectoria un conocimiento de los grandes pintores, escultores, grabadores, tapiceros y ceramistas y ese conocimiento no le lleva a seguir rigurosamente los cánones clásicos sino que construye siempre una obra abierta, proteica y polifónica.

Zaafra conoce muy bien el mundo del flamenco, un arte tan profundo, tan brillante y tan misterioso, sobre cuyas raíces, naturaleza y modalidades nunca ha existido ni existirá acuerdo entre sus cultivadores y sus estudiosos. Se lo ha buscado en la mezquita árabe y en la sinagoga judía, en la mina, en la cárcel y en fragua, y se lo ha encontrado y se lo encuentra en aquellos escenarios donde se sabe combinar el misterio y la sabiduría con el sentimiento.

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