Los gatos asilvestrados se han convertido en una amenaza para muchas especies de vertebrados endémicos, que se convierten en alimento de estos animales que han escapado del control de los seres humanos. Esta situación es mucho más acusado en islas de pequeño tamaño.
Un equipo internacional liderado por investigadores del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) ha examinado el papel de los gatos asilvestrados en el contexto de la crisis de biodiversidad que sufren las islas y ha determinado que estos invasores han contribuido a la extinción de al menos 33 especies de vertebrados endémicos. Los resultados, publicados en la revista BioScience, recogen que 13 especies se encuentran en peligro crítico en 12 islas de dimensiones reducidas.
Los investigadores han identificado aquellas islas donde existe una gran probabilidad de que acontezcan las próximas extinciones causadas por esta especie invasora. Para ello han tenido en cuenta datos sobre la alimentación, los impactos sobre la conservación de especies amenazadas y la experiencia de las campañas de erradicación ya realizadas. Según estos resultados, dos reptiles, nueve aves y dos mamíferos se encuentran en peligro crítico de acuerdo con la catalogación de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza.
“Los datos que hemos obtenido pueden ser de gran utilidad a la hora de dedicar los escasos fondos de que disponen las agencias de conservación, a nivel nacional o internacional, a la vez que se priorizan la erradicación de gatos asilvestrados, además de otras especies invasoras, en un contexto global”, destaca Manuel Nogales, investigador del CSIC en el Instituto de Productos Naturales y Agrobiología, ubicado en Tenerife.
La introducción de especies invasoras, particularmente de mamíferos depredadores, es uno de los principales factores que contribuyen a la extinción en las islas. Desde la domesticación del gato salvaje africano hace unos 9.000 años, el hombre ha dispersado ampliamente el gato doméstico, que ha establecido poblaciones asilvestradas en islas de todo el mundo, incluso en los archipiélagos más remotos.
Siete de las 12 islas que albergan especies de vertebrados en peligro crítico se encuentran en el océano Pacífico: Alejandro Selkirk (Chile), Guadalupe (Baja California), Floreana (Islas Galápagos), Socorro (Islas de Revillagigedo), Fatu Hiva (Polinesia francesa), Robinson Crusoe (Chile), y San Lorenzo Sur (Baja California); tres de ellas en el Caribe: Cayo Pine (Islas Caicos), Pequeña Caimán (Islas Caimán), y Anegada (Islas Vírgenes Británicas); una en el Índico, Ámsterdam (Tierras Australes y Antárticas Francesas), y otra en el Mediterráneo (Baja California). Todas ellas tienen una extensión inferior a los 290 kilómetros cuadrados y su población no supera los 900 habitantes.