Rafael Álvarez ‘El Brujo’ lleva al Teatro Auditorio de El Ejido la representación de ‘Lazarillo de Tormes’, un clásico de la literatura española del Siglo de Oro para la que no ha pasado el tiempo. El espectáculo tendrá lugar el próximo sábado, 23 de enero a las 21:30 horas. Las entradas están ya a la venta en el Área de Cultura del Ayuntamiento de El Ejido y en Uniticket.com .
La adaptación al teatro de esta obra ha estado guiada por Fernando Fernán Gómez, quien ha conseguido una adaptación inigualable que, unida al talento de El Brujo, hacen de este espectáculo un éxito asegurado.
«El Lazarillo trata de la marginación, el hambre y la vivencia dura de la infancia. Los paralelismos entre el mundo del infante que acompaña al ciego y la situación de tantos niños del tercer mundo que mueren de inanición son obvias. La historia se repite una y otra vez. Como casi siempre, esta situación es la consecuencia de un mundo de desequilibrios en el que los bienes están descompensados. Y nace de la falta de conciencia ante el valor de la vida», según explica Rafael Álvarez.
Rafael Álvarez nace En Lucena (Córdoba). Pasa gran parte de su infancia en Torredonjimeno (Jaén). Se traslada a Madrid para estudiar Derecho y es en los Colegios Mayores donde toma contacto por primera vez con el mundo del teatro. Es titulado por la Real Escuela Superior de Arte Dramático. Su actividad con el teatro se inicia en el Corral de Comedias del Colegio Mayor Universitario San Juan Evangelista en el año 1970; con el montaje El juego de los insectos, de los hermanos Kappeck; dirigido por José Luis Alonso de Santos. A partir de este momento colabora habitualmente en montajes teatrales de diversas compañías como Tábano, TEI (Teatro Experimental independiente) y Teatro Libre de Madrid.
En 1988 funda junto con José Luis Alonso de Santos, Gerardo Malla y Jesús Cimarro, la productora de teatro, Pentación, S.A. y en 1995 funda, junto a Mª José Norte, su propia productora, Producciones El Brujo, S.L. dedicada a la distribución y la producción de teatro y audiovisuales.
Como reconocimiento a su carrera, Rafael Álvarez ha recibido numerosos premios, entre los que destacan el Premio Ícaro, concedido por Diario 16, el Premio De Antena 3 a la mejor interpretación teatral (1985), por su trabajo en Lazarillo de Tormes; Premio El Espectador y La Crítica 1986, por La Taberna Fantástica, Premio Asociación de Espectadores Ciudad de Alicante en 1986 y 1994, por Lazarillo de Tormes; Premio Ercilla de Bilbao 1996 a la Mejor Interpretación por La sombra del Tenorio; Premio Meliá Parque al Mejor Actor por Anfitrión; Premio Cadena COPE, Ilustres de Baracaldo 1999 por El Contrabajo; y Premio Canal Sur al Mejor Espectáculo teatral 2000 por Arcipreste.
En diciembre de 2002 se le concedió la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes, máximo galardón que concede el Ministerio de Cultura y que SS.MM. los Reyes de España entregaron en septiembre de 2003.