Lo he intentado pero no he conseguido enterarme ni cuándo ni quién ha instaurado el día 16 de noviembre como el día internacional del flamenco. Quien haya sido ha tenido la feliz idea de hacerlo coincidir con el aniversario de la declaración del flamenco como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la Unesco.
Ya han pasado dos años de este “histórico hito” y todavía no hemos podido ver en qué ha beneficiado este reconocimiento a nuestro arte. He de confesar que nunca tuve grandes expectativas, pero después de tanto bombo y platillo de la Junta de Andalucía, esperaba que hicieran algo que mereciera la pena reseñar en este artículo.
En este “día señalaíto”, los pronunciamientos han sido muchos y diversos. Por ejemplo, la Asociación de Artistas Flamencos dice que hay que apostar por “introducir definitivamente la enseñanza del flamenco”. Esto, que desde Jondoweb llevamos defendiendo desde el año 2005, es algo que ya prometieron hace dos años desde la Junta, y aparte de un titular en el que decían que iban a sentarse para charlar, no ha habido ningún avance. Y digo yo que esta es una de las cosas que podrían hacer sin que impliquen grandes desembolsos de dinero, y por tanto, la falta de desarrollo no se le puede achacar a la crisis…
En Jerez, como Meca del flamenco que todos reconocen, en vez de un día, han celebrado la Semana del Flamenco. Otro invento magnífico, que ha servido para que los políticos locales se turnen en el micrófono y reconozcan en este arte la panacea para crear economía y salir de la crisis. Así, sin más… con “dos pantalones”… Los políticos no se acuerdan ni de los caballos, ni del vino, ni de las carreras de motos… Ahora delegan la responsabilidad de sacarnos de la crisis en los flamenquitos. Esos mismos que ahora más que nunca andan “lampando” por un escenario que echarse a la cara.
Pero el súmmum del disparate lo tenemos en la presentación de la Academia del flamenco en Cataluña. Así es… se está creando una Academia de las Artes y las Ciencias del Flamenco desde Cataluña. Y es ahora cuando Gobierno Español y la Junta de Andalucía se vuelcan… ¿Dónde quedará la Academia si Cataluña finalmente consigue la Independencia?
¡Pero esto sólo es política!. Porque lo que no se ve es una realidad bien distinta. El flamenco en España es un arte de minorías porque a diferencia del País Vasco, nosotros mismos infravaloramos lo que hemos sido, lo que somos y lo que podemos ser (eso se llama “desidia”). Porque a diferencia de Extremadura, aún no hemos aprendido a amar aquello que nos configura como únicos (eso se llama “ausencia de amor propio”). Porque a diferencia de Cataluña, aún no hemos entendido que la divulgación de la cultura propia bien entendida es lo que puede unirnos para poder caminar en una única dirección (eso se llama “falta de cohesión”).
Lo que no se ve en todos estos actos es el ARTE FLAMENCO. Esa forma de cantar que utiliza técnicas vocales, vibratos, melismas y giros melódicos que ninguna otra música utiliza. Esa forma de tocar que obliga a una disciplina guitarrística única, con picados vertiginosos, arzapúas, rasgueos y técnicas de pulgar que fantasean sobre la escala andaluza con una creatividad desbordante. Esa forma de bailar racial y sensual que utiliza las manos y el zapateado como elemento percusivo mientras cuentan una historia. En definitiva, ese ARTE FLAMENCO que llena teatros en cualquier parte del mundo, menos en España, porque a nuestros hijos no les enseñan a valorarlo. Como si Mozart fuese más importante que Paco de Lucía… ¡Pues no!. En todo caso, será tan importante como Paco de Lucía. Eso si, con todos mis respetos a Mozart, con el que siempre he disfrutado muchísimo. Pero con mi absoluta veneración a Paco… que es tan único como el que más….
